La morosidad de los créditos alcanza el máximo en nueve años por las cajas
La situación económica está originando un aumento importante de los dudosos de la banca. Sin contar con el efecto Martinsa, el sistema financiero español registra ya el 1,61% de morosidad, la tasa más alta de los últimos nueve años, según el Banco de España. Algunas cajas incluso lo doblan, como Caixa Catalunya y Caja España, y la media se sitúa en el 1,9%.
La excesiva exposición de las cajas de ahorros al mercado hipotecario está elevando la tasa de morosidad de todo el sistema español a cotas que hacía tiempo no se veían. Según datos del Banco de España, bancos, cajas y cooperativas, acabaron el primer semestre del ejercicio con una tasa de morosidad del 1,61%, el nivel más alto de los últimos nueve años, cuando se llegó a alcanzar el 1,65% en 1999.
Desde aquel ejercicio y hasta los momentos previos a la crisis subprime, la ratio de dudosos había ido descendiendo gracias a que la mayoría de los créditos concedidos por estas entidades eran hipotecarios y pocos deudores dejaban de pagar sus cuotas mensuales. En junio de 2007, la mora se situaba en el 0,69%, casi la mitad que en la actualidad.
Sin embargo, el repunte del euríbor -que ha pasado del 4,50% en junio de 2007 al 5,36%, con una subida de 0,85 puntos porcentuales- ha disparado los activos dudosos.
El coste de proteger de un impago los bonos respaldados por hipotecas en Caja Madrid bate su récord
El informe del Banco de España señala que el 1,69% (31.220 millones) del total de préstamos firmados por la banca (1,838 millones) son morosos. Las cajas lideran los fallidos con una media del 1,9% de mora, el triple que hace un año, frente al 1,28% de los bancos, el doble que en junio de 2007, y el 1,59% de las cooperativas de crédito. Y esta cifra sin añadir la deuda de Martinsa.
La constructora tiene comprometidos con las diez mayores cajas una deuda de 2.766 millones, el 53% del total. Algunas entidades como La Caixa han preferido no pillarse los dedos y cubrir ya en junio estos activos. Así, La Caixa ha destinado 192 millones de euros brutos (134 netos de impuestos) a dotar los préstamos concedidos a Martinsa, con el consiguiente impacto en la morosidad que le sube 0,58 puntos porcentuales en un trimestre hasta el 1,26%.
Por su parte, Caja Madrid roza peligrosamente el 2%, con 1,89% de mora en junio. La entidad tuvo que pagar ayer un sobreprecio, batiendo un récord, para poder cubrir los bonos respaldados por hipotecas -credit default swaps- ante la previsión de un repunte.
Pero la situación menos halagüeña de las cajas analizadas, la presenta Caja España, con una ratio de mora en 3,9% y una cobertura del 72%, por debajo del 100%.
En sólo tres meses (abril, mayo y junio), los dudosos han crecido por encima de los 0,50 puntos porcentuales en al menos siete de las cajas analizadas, un ritmo que de seguir así podría poner en apuros al sector. No obstante, todavía las entidades españolas se encuentran lejos del 6,35% que registra EE UU y no digamos ya, del 18,79% que presentaban las hipotecas subprime. Pero es cierto, que la mora todavía no ha llegado al consumo y esto les perjudicará.
Las catalanas, en el punto de mira
La tercera caja española, Caixa Catalunya, cuenta con una de las tasas de morosidad más altas del sector. En el pasado mes de junio, la mora se le disparó al 2,50% frente al 1,68% con el que cerró en el primer trimestre del ejercicio. A eso se suma que la tasa de cobertura se ha reducido en el primer semestre al 91,70%, por debajo del 100%, algo que también le ocurre a Caja España -son las dos cajas de ahorros analizadas que presentan menores índices de cobertura-. Otra entidad catalana, Caixa Laietana, registra también una de las tasas de dudosos más altas del sector, con el 3,20%.Pero, además, las cajas catalanas han tenido que aguantar el chaparrón de las agencias de calificación estadounidenses. Moody's anunciaba a principios de agosto una revisión de su rating, que en el caso de Caixa Catalunya pasaba de A1 a A2, por su alta exposición al mercado inmobiliario. También reducía la calificación a Caixa d'Estalvis de Tarragona (Baaa) que se quedaba a tres escalones de quedar calificada como 'basura', y a Caixa d'Estalvis de Terrasa, que bajaba a un rating del A3.