La crisis no bebe Coca-Cola
El presidente de Coca-Cola para España y Portugal, Marcos de Quinto, aseguró hoy que las ventas de la compañía están descendiendo alrededor de un 6% en bares y cafeterías debido a la "casi recesión" económica.
"Supongo que la gente sale menos que antes", argumentó de Quinto, antes de precisar que los ingresos procedentes de tiendas y supermercados se mantienen estables. Marcos de Quinto hizo estas declaraciones durante los cursos de Verano de la Universidad Complutense de El Escorial, donde impartió la ponencia 'El anunciante 2020'.
El presidente de la filial española de Coca-Cola subrayó la política de moderación de precios mantenida por la compañía, como pone de relieve la subida "moderada" en sus bebidas, y comparó dichas cifras con el mayor incremento en lácteos y zumos. Por otra parte, preguntado sobre las diferencias en el sabor del refresco en los distintos países, negó dichas disparidades, y agregó que, aunque sí difiere el agua de cada territorio que se incluye en la mezcla, la empresa la "estandariza" a través de filtros.
En relación con la ponencia sobre publicidad en la que participa, Marcos de Quinto resaltó la descentralización de sus anunciantes, en función del país al que se dirijan y sus factores sociológicos y culturales. "Toda la publicidad que se emite en España está hecha desde aquí. Nosotros hacemos publicidad relevante para el público español", agregó, antes de recordar el origen del Papa Noel con traje rojo, que la compañía encargó a "un pintor norteamericano en una campaña publicitaria". Según explicó, a fuerza de repetir los anuncios del personaje navideño vestido de rojo, el público se fue sintiendo cada vez más identificado con su nueva imagen.
"Hay mucha gente que está muy interesada en encontrarle algo malo a Coca-Cola", resaltó, cuestionado también sobre las voces que acusan al refresco de contener alguna sustancia cancerígena. Así, remarcó la labor de los Ministerios de Sanidad de cada país, y de los controles en seguridad alimentaria, que han demostrado que "la gente que toma Coca-Cola está muy sana". "No hace falta gastarse dinero para desmentir esos rumores", indicó, antes de concluir que los 137 años del refresco dan fe de ello.