Martinsa-Fadesa cuantificará el martes el recorte de empleo
Martinsa Fadesa comunicará finalmente a los representantes de los trabajadores el próximo martes el número exacto de empleos que tiene previsto recortar para ajustar el tamaño de la compañía a las nuevas condiciones del mercado.
La inmobiliaria Martinsa-Fadesa anunció ayer que tiene previsto informar el próximo martes día 15 a los representantes de sus trabajadores del número de empleados a los que afectará el ajuste de plantilla que diseña en la compañía. Actualmente, la empresa cuenta con 880 trabajadores, y tiene la intención de adaptarla a las nuevas condiciones del mercado. Los representantes de la inmobiliaria que controla y preside Fernando Martín informaron ayer de esta decisión en la reunión que mantuvieron con los representantes de los trabajadores.
En este encuentro, además, quedó conformada la comisión que negociará el expediente de regulación de empleo que está previsto. Además, las partes acordaron arrancar el martes el preceptivo periodo de consultas.
Los representantes de Martinsa-Fadesa rechazaron avanzar dato alguno respecto al alcance del ajuste remitiéndose a la reunión del día 15, en la que, según anunciaron, presentarán el documento que justifica el ERE, el número y la lista de personas a las que afectará y la propuesta económica. Con el ajuste, Martinsa-Fadesa persigue adaptarse a la nueva coyuntura del sector inmobiliario, marcado por un descenso de la actividad y las ventas, y corregir la 'sobredimensión', según fuentes internas, que actualmente presenta la compañía.
Representantes de recursos humanos de la delegación de Martinsa-Fadesa en A Coruña ya se reunieron hace unas semanas con el comité de empresa de dicho centro. En el encuentro la empresa avanzó que prevé prescindir de alrededor de 60 trabajadores de la sede coruñesa.
La inmobiliaria se creó a principios de 2007 tras la fusión de los negocios inmobiliarios de Fernando Martín y su socio Antonio Martín con la inmobiliaria gallega Fadesa, que controlaba Manuel Jove.
Por su parte, desde la empresa explicaron entonces que la inmobiliaria 'debe reestructurarse a nivel estatal en función de sus necesidades' por lo que avanzaron su disposición a abrir una negociación en Madrid con representantes de todas las delegaciones para tomar 'una decisión global'.
Los efectos de la crisis inmobiliaria
El año no comenzó demasiado bien para la inmobiliaria de Fernando Martín. Tras lograr un acuerdo con sus acreedores para refinanciar su deuda de 5.153 millones de euros, la mayor parte proveniente de la compra de Fadesa a Manuel Jove en 2006, la intención del empresario era poner en marcha su plan de negocio, que tendría que tener en cuenta el parón en la venta de viviendas en España.Sin embargo, la inmobiliaria registró unas pérdidas de 85,1 millones de euros en el primer trimestre del año, frente a unos beneficios de 412,9 millones del mismo periodo de 2007.A mitad de año, los beneficios en el resultado del grupo consolidado ascendían a 60 millones mientras que, en los resultados individuales, registró unas pérdidas de 285,4 millones. La empresa redujo su activo contable en 151 millones, hasta 9.581 millones.