Navantia se enfrenta a Arcelor por subir el precio del acero
Navantia está estudiando denunciar ante un tribunal de arbitraje a ArcelorMittal, después de que éste haya roto el acuerdo marco de suministro de acero firmado con los astilleros públicos. El grupo siderúrgico ha decidido aplicar, de forma unilateral, una subida del 24,2% a los precios pactados para todo 2008.
Guerra abierta entre Navantia y ArcelorMittal. El grupo público de astilleros (Cádiz, Ferrol y Cartagena) y el gigante de la siderurgia mundial pueden acabar en un tribunal de arbitraje por un contrato que ronda los 33 millones de euros. El motivo: la decisión del conglomerado que preside Lakshmi Mittal de incumplir el pacto de precios para el suministro de acero cerrado para todo el año 2008.
El pasado 30 de diciembre, Navantia firmó con ArcelorMittal un acuerdo marco de suministro de chapas de acero para 2008. Según este acuerdo, el grupo siderúrgico garantiza un volumen mínimo de 50.000 toneladas para todo el ejercicio, incluidas 5.000 toneladas trimestrales de chapa gruesa destinada a la fabricación de aerogeneradores. El contrato resulta ventajoso para las dos partes. Por un lado, porque Navantia tiene que comprar en exclusiva al grupo con sede en Luxemburgo las primeras 30.000 toneladas que necesite para la construcción de buques militares y torres eólicas. Por el otro, porque ArcelorMittal garantiza a los astilleros un precio fijo para todo el ejercicio, que en este caso era de 660 euros por tonelada, una subida del 5% respecto al precio pactado en 2007. Pese a este compromiso escrito, el grupo de LakshmiMittal ha comunicado recientemente a Navantia que, desde el pasado día 1, el precio base para los pedidos con entregas en julio, agosto y septiembre pasa a ser de 740 euros por tonelada. Para las entregas en el cuatro trimestre, el precio será de 820 euros, es decir, un 24,2% más que lo acordado.
Esta revisión no sólo supone una vulneración del acuerdo suscrito sino que, además, tiene carácter retroactivo, puesto que los pedidos se hacen en el trimestre previo a su recepción. De esta forma, el nuevo precio de 720 euros se está aplicando, en la práctica, sobre unos encargos que los astilleros realizaron en abril, cuando ArcelorMittal todavía no había comunicado su intención de encarecer el producto. El grupo siderúrgico justifica su decisión por la evolución alcista de las materias primas que necesita para fabricar el acero (hierro y carbón, principalmente) y de otros costes, como los fletes. Lo cierto es que, sólo este año, los tres principales productores mundiales de hierro, las mineras Vale, BHP y Río Tinto, han aplicado a sus clientes unas subidas de entre el 65% y el 97%. Desde 2001, los precios del hierro se han incrementado un 380% y los del carbón, un 600%.
Al arbitraje
En este marco, ArcelorMittal argumenta que los nuevos precios que ofrece al grupo de construcción naval siguen siendo atractivos, teniendo en cuenta que el precio base de referencia para el sector naval se situará en los 900 euros por tonelada en septiembre y que se elevará a los 950 euros para el cuarto trimestre. Todo ello sin incluir los costes de transporte, que sí están contemplados en el caso de los astilleros públicos. Navantia, sin embargo, no está dispuesta a aceptar las nuevas condiciones y recuerda que, hasta ahora, Arcelor siempre había respetado los acuerdos marco, incluso en 2004, cuando también sufrió un serio aumento de los costes, que esperó a repercutir a 2005. Por este motivo, el grupo público estudia llevar la disputa a la Corte civil y mercantil de arbitraje de la Cámara de Comercio de Madrid, tal y como prevé el pacto. Si no se arregla la situación a corto plazo, la empresa comenzará a comprar acero en lugares como Rusia o China.
Los astilleros también se quejan de la presión que ejerce el grupo de Lakshmi Mittal, sabedor de su posición de dominio como suministrador. Así, Arcelor ha advertido de que si no se aceptan los nuevos precios, en 2009 no negociará un nuevo acuerdo marco, lo que obligaría a Navantia a acudir al mercado spot, con costes mayores. La situación que vive el grupo estatal es similar a la de otros astilleros privados que habían firmado un contrato con ArcelorMittal (como Barreras) y a los que ahora también se les están subiendo los precios.
"Subvención" al acero con la tarifa eléctrica
Desde el grupo público de construcción naval también aprovechan para recordar que, pese a los incrementos de coste en las materias primas con los que ArcelorMittal justifica el encarecimiento del acero, el gigante siderúrgico disfruta todavía de una tarifa eléctrica reducida, por debajo de los costes de generación y que “subvencionan” todos los ciudadanos a través de la factura de la luz.El pasado día 1, con la revisión trimestral de las tarifas eléctricas, el Gobierno suprimió la tarifa general de alta tensión, a la que se acogían cerca 60.000 empresas, incluidas las de la industria básica.La medida responde a una de las directivas europeas para la liberalización del mercado eléctrico debía haber entrado en vigor en julio de 2007. No obstante, el Ejecutivo ha decidido mantener hasta el 1 de enero de 2009 la tarifa G4, de la que podían disfrutar los consumidores muy intensivos de energía. En la actualidad, los beneficiarios de estos ventajosos precios de la electricidad son cinco fábricas de tres grandes multinacionales, como ArcelorMittal, Alcoa y Asturiana de Zinc (quepertenece al grupo Xstrata).ArcelorMittal cuenta con un punto de suministro, con 1.300 GWh, que factura con la G4. Las compañías eléctricas calculan que con esta tarifa especial, las tres empresas siderúrgicas se están ahorrando unos 450 millones de euros al año.
Acero naval en España
Navantia es, de lejos, el principal consumidor de acero para la construcción de barcos en España. Con unas necesidades anuales aproximadas de 50.000 toneladas de producto, el grupo público copa la mitad del consumo de acero de todo el sector. El 90% del suministro lo tiene contratado con ArcelorMittal.