El Gobierno creará un gran operador logístico tras la segregación de Renfe Mercancías
La segregación de la unidad de Mercancías de Renfe fue la medida más inesperada anunciada el lunes por el presidente del Gobierno. Responde a un plan para crear un operador logístico que utilice la red convencional de tren reforzada en la conexión con puertos y con circunvalaciones en Madrid, Barcelona y Valencia.
La práctica totalidad de las personas y entidades que tienen algo que decir en el mundo del ferrocarril en España recibieron con auténtica sorpresa el anuncio del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, acerca de su propósito de propiciar la segregación de la unidad de Mercancías de Renfe como una de las 21 medidas para reactivar la economía.
Fuentes cercanas a Moncloa han explicado que esta iniciativa y también el protagonismo que alcanzó el anuncio de la nueva Ley de Puertos, se gestaron al calor del conflicto protagonizado por los camioneros en protesta por la subida del petróleo hace tres semanas. El Gobierno se ha convencido de que un país moderno no puede apoyar su soporte logístico básico en un sector como el de los transportistas por carretera y el 7% de cuota de mercado con que participa el ferrocarril en el transporte de mercancías es absolutamente insuficiente, dijeron las fuentes citadas.
Detrás de la segregación de la división de Mercancías de Renfe se esconde un ambicioso plan para otorgar a la red ferroviaria española un protagonismo igual o mayor en el tráfico de cargas, que el que está consiguiendo a base de desarrollar las líneas y los servicios del AVE.
Aunque en principio la empresa segregada tendrá capital 100% estatal, las fuentes citadas señalan que, a medio plazo se convertiría en el instrumento para crear un gran operador logístico en el que tendrían algo que aportar las empresas privadas de logística que se han creado en España a partir de la diversificación de los grupos de construcción y servicios. La mayor parte de estas sociedades han entrado ya en el mundo del ferrocarril aprovechando, precisamente, el proceso de liberalización de los tráficos de carga que se produjo en 2005. Y un número significativo han firmado acuerdos de colaboración con Renfe Mercancías.
Los sindicatos con presencia mayoritaria en las empresas ferroviarias Renfe y Adif, que han recibido con gran recelo el anuncio de Rodríguez Zapatero, temen que la nueva empresa segregada pudiera terminar integrándose en el holding público SEPI para someterse a medio plazo a algún esquema de privatización, aunque fuera de una parte minoritaria de su capital.
Infraestructura
Pero el plan para lograr un mayor peso del ferrocarril en los esquemas logísticos nacionales no sólo afectarán a Renfe. El Adif va a tener que acometer importantes transformaciones en la red convencional del ferrocarril español. Aprovechando la paulatina liberación de tráficos de estas infraestructuras sobre la base del crecimiento de las redes del AVE, el Gobierno quiere que se conviertan en el soporte de un tráfico de cargas cada vez más eficiente.
En esta línea se considera imprescindible resolver los cuellos de botella que suponen para los trenes de mercancía el paso inevitable por las principales ciudades, Madrid, Barcelona o Valencia. La densidad de los servicios de cercanías imponen retrasos incompatibles con un esquema logísticos. También se quiere actuar sobre los accesos por tren a los principales puertos, como medida para convertirlo en el principal modo de distribución de carga que entra y sale por ellos.
UGT y CC OO convocan la comisión de conflictos
Los sindicatos de Renfe Operadora, UGT y CC OO han recibido el anuncio de la segregación de la división de Mercancías como una auténtica declaración de guerra. Como primera medida han convocado la Comisión de Conflictos de la empresa, que es el paso previo a la convocatoria de movimientos de huelga. El próximo viernes las dos centrales han sido convocadas en el ministerio de Fomento para recibir las explicaciones oportunas. Miguel Ángel Cillero, responsable de la Federación de Transportes de UGT afirma que su sindicato no entiende como el presidente de Gobierno aseguró hace menos de una semana que cualquier medida económica se consensuaría con los agentes sociales y poco después 'se descuelga con un anuncio que no ha sido comunicado y que atenta contra los intereses de los 2000 trabajadores de Mercancías de Renfe Operadora'.