El ajuste inmobiliario y el crudo reducen un 80% el superávit del Estado hasta mayo

El Estado registró hasta mayo un superávit de 2.722 millones de euros en términos de Contabilidad Nacional (el 0,24% del PIB) frente al excedente de 13.592 millones obtenido en el mismo periodo del año anterior, lo que representa un descenso del 80%, según informó hoy el secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña.

La caída a la mitad del superávit hasta mayo se debe a la desaceleración de la economía española, principalmente en el sector inmobiliario. Además, el alto precio del crudo está produciendo aumentos en los costes empresariales y, por tanto, una merma en sus beneficios.

Este resultado es consecuencia de unos pagos que se situaron en 57.629 millones de euros, con un aumento del 9,5%, mientras que los ingresos ascendieron a 60.351 millones de euros, lo que supone un descenso del 8,9%.

En términos de caja, que computa los ingresos y gastos que efectivamente se han realizado durante el periodo, el Estado alcanzó un superávit de 3.186 millones de euros, frente a los 11.220 millones del mismo periodo del año anterior, lo que supone una reducción del 71,6%.

Así, aunque aún se mantiene el superávit, disminuye considerablemente en comparación con el año anterior debido a la desaceleración en la que está inmersa la economía española.

La recaudación de ingresos no financieros ascendió a 82.445 millones de euros durante los cinco primeros meses del año. Los impuestos directos se elevaron hasta los 40.489 millones de euros, un 3,3% más, como consecuencia, sobre todo, de la fortaleza del IRPF, que creció un 9,8%, gracias a los ingresos obtenidos por retenciones del trabajo y del capital. Por su parte, la recaudación del Impuesto de Sociedades cayó un 19,7%.

Según Ocaña, el descenso de Sociedades se debe al régimen especial del cálculo de los pagos fraccionados de este impuesto que ha puesto en marcha el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero para facilitar la adaptación de las empresas a la nueva normativa contable.

Los ingresos por impuestos indirectos alcanzaron los 35.585 millones de euros, un 13,4% menos que en 2007. La recaudación por IVA se elevó a 26.299 millones de euros, un 17,8% menos en comparación con el mismo periodo del año anterior, como consecuencia de la disminución de los ingresos brutos de ligados fundamentalmente al sector de la construcción, así como a la agudización del efecto del alto precio del crudo.

La recaudación de hidrocarburos cae un 2,4%

Por su parte, los impuestos especiales se elevaron hasta los 7.977 millones, al crecer un 2,5% en tasa interanual. De este capítulo destaca la recaudación del Impuesto sobre las Labores del Tabaco, que aumentó un 9,9% en los cinco primeros meses del año, y la recaudación del Impuesto de Hidrocarburos, que cayó un 2,4% por el menor consumo debido al encarecimiento del crudo en los últimos meses.

En cuanto a los gastos pagos no financieros, se situaron en 56.737 millones de euros, un 4,5% más que entre enero y marzo de 2007. Los gastos financieros ascendieron a 7.082 millones de euros, un 12% más, mientras que los pagos por gastos de personal se elevaron hasta los 9.259 millones (+6,5%) y las transferencias corrientes se situaron en 32.516 millones, un 6% más.

Finalmente, al cierre del quinto mes del año el Estado registró una necesidad de endeudamiento de 746 millones de euros, mientras que en el mismo periodo del año anterior situó esta necesidad en 4.627 millones de euros.