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Transporte

Trasmediterránea sube precios y reduce viajes por el alza del crudo

El encarecimiento del combustible y la guerra de tarifas han obligado a Trasmediterránea a replantearse precios y rutas. Tras los recientes cambios en su directiva, la filial de Acciona ha revisado sus presupuestos y estrategias en función de una previsión del barril de petróleo en torno a los 150 dólares.

Trasmediterránea no se vende. Lo dejó claro la semana pasada José Manuel Entrecanales, presidente de Acciona, socio mayoritario de la naviera con el 61% del capital. Pero la compañía, en la que también participan la CAM (15%), las navieras Aznar (10%) y Armas (8%), y el Grupo Matutes (6%), acaba de poner en marcha un plan de choque para paliar la subida exponencial del precio del crudo y la batalla de tarifas. Los dos problemas han afectado a la actividad de la filial del grupo de construcción, energía y servicios 'durante los últimos cuatro años', según reconoció Entrecanales en la junta de Acciona celebrada el pasado jueves.

Trasmediterránea elabora sus presupuestos anuales, en los que se aúnan previsiones económicas y estratégicas, en base a la estimación de analistas y agencias especializadas sobre la evolución del combustible. Según la información a la que ha tenido acceso CincoDías, los de 2008 se diseñaron con previsiones para el gasoil en torno a los 620 dólares por tonelada y de 325 dólares por tonelada para el fueloil, los dos tipos de combustible más demandados por la firma.

Unos cálculos que se han revisado en los últimos días y que ahora toman como precio de referencia los 1.044 dólares para la tonelada de gasoil (un 68,4% más que hace tres meses) y los 498 dólares (un 53,2% más).

La factura de los combustibles se ha duplicado en tres meses para la naviera

Con el barril de Brent disparado -en marzo cotizaba sobre los 100 dólares y ahora lo hace por encima de los 130 dólares- Acciona Trasmediterránea ha reaccionado para tratar de minimizar el impacto en sus cuentas. De este modo, ha replanteado su actividad en base a un barril en el terreno de los 150 dólares.

Fuentes de la compañía han confirmado que entre las decisiones figura un 'leve encarecimiento' de los billetes y un recorte en el número de trayectos. 'La subida de precios y la optimización de las líneas es una tendencia en todo el sector', dice la versión oficial de la empresa, 'se trata de viajar con los barcos al completo'.

Caerán las millas navegadas

Trasmediterránea, con 34 buques (nueve de alta velocidad, 11 mixtos de pasaje y carga, y 14 de carga), cubrió en 2007 un total de dos millones de millas navegadas, una cifra que se verá recortada en el presente ejercicio aproximadamente en un 5%, según fuentes consultadas por este periódico.

Se trata de la consecuencia de la concentración del número de trayectos en las líneas con menos demanda. En 2007 las ventas del área de Logística y Transportes de Acciona descendió un 3,8% y el Ebitda lo hizo un 40,7%. Ahora se trata de frenar una nueva caída.

Dos retos para el nuevo presidente

Plantar cara a la creciente factura del combustible ha sido la primera tarea a la que se ha enfrentado el equipo gestor de Trasmediterránea tras la llegada a la presidencia de Jorge Vega-Penichet, secretario del consejo de administración de Acciona y, desde finales de mayo, presidente de la naviera controlada por el grupo de construcción. Junto a la entrada de este hombre de confianza de la familia Entrecanales, se dio el ascenso de Antonio Grávalos desde su anterior cargo de director general, al que accedió en febrero de 2007, a consejero director general. Por su parte, ha salido de la naviera Juan Sáez Elegido, anterior presidente y nuevo director general de relaciones institucionales de Acciona. El segundo gran reto tiene que ver con un concurso. Y es que las previsiones de crecimiento pasan por la posible adjudicación de la autopista del mar entre España y Francia. Una ruta llamada a sacar de las carreteras de los Pirineos un total anual de 835.000 camiones, lo que supone un 45% de las mercancías que transitan la zona. España y Francia garantizan ayudas mínimas por 30 millones al año al adjudicatario.

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