El encarecimiento del crudo impulsa recortes de vuelos para las aerolíneas
Las grandes aerolíneas preparan ya su respuesta de cara al encarecimiento del crudo y a la ralentización de la economía mundial, y muchas han anunciado esta misma semana recortes en operaciones, vuelos y flota de cara al invierno para reducir costes.
Concretamente, Air Berlin anunció que reducirá un 11,6% su flota en invierno como parte de un recorte de costes ante el incremento del precio del combustible. La aerolínea pasará de tener 134 aviones a 120 a finales de año.
Además la aerolínea anunció una serie de modificaciones de los vuelos de invierno con respecto a la temporada de verano con la suspensión de las conexiones con Pekín y Shanghai, los vuelos desde Dusseldorf a Nueva York, así como las rutas a Mauritius y Sri Lanka. Los enlaces a Ciudad del Cabo, Windhoek y Bangkok se verán recortados.
Otra de las aerolíneas de bajo coste que se está planteando reestructurar sus rutas a partir de octubre es la irlandesa Ryanair, que anunció que está estudiando la posibilidad de reducir rutas y frecuencias de vuelo. La compañía de bajo coste avanzó que otro de los factores que ha impulsado la decisión son los incrementos de las tasas en los aeropuertos de Londres, Stansted y Dublín, aunque no precisó cuáles serán los vuelos que resultarán afectados por los recortes.
Por otra parte, el presidente de la aerolínea lusa TAP, Fernando Pinto, ha admitido que la compañía podría cancelar de manera temporal algunos vuelos después del verano para hacer frente al encarecimiento del combustible.
Pinto señaló que ¢puede no ser interesante volar a algunos mercados en una determinada época, por lo que esos vuelos serían suspendidos temporalmente¢, afirmó el responsable, que no avanzó ni cuantos vuelos ni cuales serían afectados. En opinión del presidente de TAP, con la cancelación de estos vuelos, algunos aviones quedarán disponibles para utilizar en otros mercados. ¢La única hipótesis es reducir la dimensión de la empresa¢ y ¢haremos todo¢ para evitar despidos, reafirmó Pinto.
Las aerolíneas europeas empiezan a tomar medidas para hacer frente al previsible ajuste del mercado, aunque desde Estados Unidos, donde la ralentización económica es ya más que evidente, las compañías han anunciado recortes mucho más severos.