Swiss Post se alía con operadores locales para llegar a toda España
Confía en ampliar un 40% su base de clientes
Swiss Post, el operador postal público suizo, ha decidido poner en marcha una nueva estrategia de alianzas con socios locales en España para incrementar su presencia en la península.
En las últimas semanas, la compañía ha cerrado sendos acuerdos con pequeñas empresas del sector en la comarca barcelonesa del Vallés, en Málaga y en Canarias con el objetivo de comercializar su oferta de productos en lugares donde antes no estaba presente.
El correo suizo ha bautizado la iniciativa con el nombre de resellers y su funcionamiento es sencillo. Swiss Post otorga a cada reseller una licencia por la cual puede hacer uso de su imagen de marca y de su red de infraestructuras. A cambio, la compañía puede comercializar sus productos desde las oficinas de los operadores locales asociados.
La estrategia, en la que se invertirán 60.000 euros, está en pleno desarrollo y, al margen de los acuerdos ya cerrados, se están buscando socios en Valencia, País Vasco y Galicia. Según Damián Ríos, director ejecutivo de Swiss Post España, el plan resellers incrementará un 35% la facturación de la compañía (10 millones de euros es la previsión para 2008) y permitirá ampliar hasta en un 40% su base de clientes.
¿Significa esta expansión que Swiss Post ha decidido entrar a competir en el mercado postal nacional? Parece que no. Damián Ríos asegura que la empresa tiene muy claro que su nicho de negocio está en los envíos postales internacionales y no en el mercado doméstico.
Consolidar la alternativa
Es éste un segmento relativamente reducido del negocio postal, en el que se mueven al año 185 millones de euros -de los cuales 150 alimentan la cuenta de ingresos del operador dominante, Correos-, pero en el que Swiss Post ocupa una privilegiada segunda plaza.
De hecho, la razón del fondo de resellers es apuntalar la condición de 'principal alternativa' del operador público suizo en el segmento de envíos postales particulares o institucionales antes de que la apertura total del mercado postal atraiga a otros grandes operadores europeos. De momento, la compañía suiza presume de ser la única de las que opera en España que es capaz de realizar envíos postales transatlánticos en un plazo inferior a los cinco días.