EDP Renováveis pierde un 4,4% en su debut, lastrada por la debilidad de la Bolsa
La compañía portuguesa EDP Renováveis se estrenó en el parqué con un descenso del 4,37% y terminó cerrando a 7,65 euros. Mal arranque para la que es la mayor salida a Bolsa del año en Europa.
Un mal día para empezar a cotizar en Bolsa. La filial de Renovables de EDP (Energias de Portugal) perdió ayer un 4,37%. La compañía comenzó por encima de los 8 euros a los que quedó fijada la OPV. Cuando alcanzó los 8,06, empezó a caer en picado y terminó a 7,65.
Este mal comienzo no es indicio de nada. De hecho, el 40% de las últimas 20 OPV en España se saldaron sin beneficios en su primer día. El estreno coincide con un mal momento bursátil; el índice PSI 20 de Portugal cedió un 1,41% y el Ibex cayó un 0,67%. Por eso, la decisión de EDP contrasta con la reciente de la concesionaria española Itínere, que abortó in extremis su operación de venta, aduciendo 'condiciones de mercado' adversas.
Sus comparables más próximos tuvieron una jornada dispar. Gamesa, estrictamente eólica, ganó un 0,27%; Iberdrola Renovables cedió un 3,21%.
EDP Renováveis tiene una capitalización de 6.898 millones, lo que la sitúa como el quinto valor de la Bolsa portuguesa. Su estreno era muy esperado, porque se trata de la mayor OPV del año en Europa. La compañía, puntera en energía eólica, ha colocado en el mercado un 25% de su capital, que ha salido valorado en 1.568 millones de euros. Este montante excluye el green shoe, el derecho de compra que tienen las entidades colocadoras, que llega en este caso a un máximo del 3,26%. El término green shoe procede de la primera compañía en hacer esta propuesta a los bancos colocadores: The Green Shoe Company.
El 80% de la oferta correspondía a una OPV dirigida a los inversores institucionales nacionales e internacionales. Este tramo fue sobresuscrito 6,1 veces. El 20% restante corresponde a una ampliación de capital, dirigida a los empleados, los accionistas de EDP y al público minorista. En este último caso, las peticiones rebasaron en 87,9 veces el volumen de acciones ofrecidas.
La operación tiene dos objetivos: financiar la estrategia de negocio de la operadora y reembolsar parte la deuda contraída con la matriz EDP, que a fecha del 31 de marzo era de 2.375,6 millones.
Antes de la oferta, la compañía estaba controlada por EDP al 80% y el 20% restante estaba en manos de Hidroeléctrica del Cantábrico, que ha visto diluida su participación hasta el 15%. La empresa fue creada en diciembre de 2007 para gestionar las actividades de EDP en el terreno de energías renovables y tiene su sede en Oviedo.
La firma registró un beneficio por acción de 0,54 euros en el primer trimestre. La cotización actual implica un ratio de PER (la relación entre el precio de la acción y los beneficios) de 14,16 veces; en línea con la Bolsa portuguesa y por debajo de Iberdrola Renovables o Gamesa.