El freno a las opas y el alza del crudo reduce el valor de Iberia en Bolsa el 50%
Iberia cotiza a mínimos de 20 meses arrastrada por el petróleo y el frenazo de las opas para su venta. Con el desplome, Caja Madrid acumula 250 millones de minusvalías. El bajo precio de la aerolínea la hace más susceptible a una opa, aunque la crisis generalizada del sector retrasa la consolidación.
El panorama de Iberia a 48 horas de la celebración de su junta de accionistas está marcada por el imparable rally del petróleo que, con un precio ayer de 132 dólares el barril, ha cambiado radicalmente las reglas de juego del negocio aéreo. La compañía vale ahora en Bolsa casi la mitad que hace 14 meses: en abril de 2007 llegó a cotizar a 4,11 euros frente a los 2,12 euros del cierre de ayer.
Aunque la caída libre de la cotización es más grave en algunas de sus competidoras, en su caso se agudiza por el frenazo del proceso de venta iniciado en febrero de 2007 y que quedó congelado en diciembre con las compras por Caja Madrid de los paquetes de Logista y BBVA.
El proceso impacta también en el balance de sus propietarios institucionales. La entidad financiera que preside Miguel Blesa, con el 23% del capital, acumula minusvalías de 250 millones. La cifra de pérdidas más sustancial se debe a que las participaciones de Logista y BBVA las pagó a 3,6 euros por título. No obstante, Caja Madrid ha ingresado en estos años unos 50 millones por dividendos.
En una situación más delicada se encuentran los accionistas minoritarios que se distribuyen algo más del 50% de las acciones. La caída libre de la cotización les provoca pérdidas multimillonarias. Existe la convicción en este colectivo de que los miembros del núcleo duro de Iberia no han actuado con transparencia. 'Anunciaron a la CNMV que ponían la compañía en venta y durante meses se movieron grupos para presentar diferentes opas. De golpe, Caja Madrid cambió sus planes y sólo dio cuenta al mercado cuando la liquidación del proceso ya era un hecho consumado', se queja un afectado. 'No parece razonable a la vista de la vigente ley de opas que un accionista con el 23% de una compañía pueda controlar de hecho su gestión y no esté obligado a pujar por el 100% del capital', señalan.
Un portavoz del último grupo de inversores que se interesó por participar en el proceso de venta de Iberia (el que estaba encabezado por Gala Capital) aseguró ayer que el interés por la operación no se ha cancelado, pero reconoció que en las actuales circunstancias 'no parece viable reavivarla'. Otro grupo de inversores que también mostró su intención de pujar por Iberia, el que estaba encabezado por Javier Salas, dice que la operación 'está muerta'.
Analistas consultados han señalado que el actual precio en Bolsa de Iberia la convierte en una 'empresa opable', pero que el contexto de crisis del negocio aéreo hace difícil iniciar ahora ningún proceso de consolidación.
Nuevo escenario de la consolidación
Pese a los problemas de financiación de cualquier operación corporativa en un contexto de crisis mundial, el proceso de consolidación del sector aéreo se hace más obligado, según los analistas. Se ha retomado en Estados Unidos, pero en Europa se enfrenta aún a la decisión de las cúpulas de las compañías de no realizar movimientos que les puedan castigar todavía más en los mercados. Es el caso de Air France-KLM que ha abandonado su apuesta por hacerse con el control de Alitalia. Iberia, la compañía que preside Fernando Conte, tras cerrar su proceso de venta, se ha centrado en el mercado interior, pero no puede evitar seguir expuesta a las tentaciones de opa, máxime a su actual precio por acción. La crisis no es menor para la compañías de bajo coste. La capitalización bursátil de Easyjet cae más de un 56% en el año y lo mismo ocurre con Ryanair (-43,8%). Los expertos creen que si el crudo se mantienen en las cotas de 120 dólares el barril, el modelo de negocio low cost tendrá que ser revisado.