Swisscom atribuyó este descenso a los costes de financiación asociados a la compra de Fastweb por más de 2.500 millones de euros, así como a otros factores, como la depreciación y la cobertura de futuros pagos en monedas extranjeras.
La facturación de Swisscom alcanzó los 2.933 millones de francos suizos (1.800,6 millones de euros) a cierre de marzo, lo que supone un incremento del 23,4% respecto a 2007, en tanto que el beneficio bruto de explotación (Ebitda) se situó en 1.161 millones de francos suizos (712,77 millones de euros), un 19,9% más.
Swisscom cerró el primer trimestre del ejercicio con 5,32 millones de clientes de servicios fijos, un 3,1% más que el año anterior, de los que 1,66 millones eran clientes de banda ancha, un 15,4% más. Además, la operadora finalizó marzo con 5,1 millones de líneas móviles, un 8,3% más.
Para el conjunto del año, la operadora suiza espera elevar su facturación hasta los 12.300 millones de coronas suizas (7.551,35 millones de euros) y situar su Ebitda en 4.800 millones de coronas suecas (2.946,8 millones de euros).