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Fallecimiento

La clase política, unida en el recuerdo a Calvo-Sotelo

La capilla ardiente con los restos mortales de Leopoldo Calvo-Sotelo fue cita obligada ayer para la clase política, que fue unánime en el reconocimiento de su labor.

Las máximas autoridades del Estado acudieron ayer domingo al Congreso de los Diputados para despedir a Leopoldo Calvo-Sotelo, el primer ex presidente fallecido desde la restauración de la democracia. Calvo-Sotelo murió el sábado a los 82 años de edad tras un fallo cardiaco.

El féretro del ex político de la UCD, que presidió el Ejecutivo entre febrero de 1981 y diciembre de 1982 y fue el encargado de dirigir el Gobierno tras la intentona golpista del 23-F, fue recibido a las puertas del órgano de la representación de la soberanía popular por el actual presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y por los responsables de ambas cámaras.

La capilla ardiente del político conservador quedó instalada en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso, hasta donde se desplazaron también los Reyes, los Príncipes de Asturias y los representantes de las principales instituciones del Estado.

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'Nunca olvidaré su encomiable entrega a España' dijo el Rey.

El rey Juan Carlos depositó sobre el féretro, velado por miembros de los tres Ejércitos, el collar de la Real Orden de Carlos III en reconocimiento a su labor política durante la Transición entre la dictadura y la democracia. El rey dijo ayer que ha muerto 'un gran español, un gran hombre de Estado, un demócrata y una persona muy querida'.

Lealtad a la Corona

En unas declaraciones remitidas por la Casa Real, Don Juan Carlos declara que 'nunca olvidaré su encomiable entrega al servicio de España durante tantos años, su impagable contribución a nuestra Transición, su labor para situar a España en el lugar que le corresponde en el mundo, y su probada y permanente lealtad a la Corona'.

Además, distintas figuras políticas tuvieron ayer palabras de reconocimiento para la labor del que fue también ex ministro de Comercio y Obras Públicas con el Gobierno de Adolfo Suárez, quien lo designó su sucesor tras su dimisión en 1981.

Rodríguez Zapatero destacó que, pese a la brevedad de su mandato -iniciado con el intento de golpe de Estado durante su sesión de investidura-, Calvo-Sotelo fue decisivo 'para consolidar nuestras libertades, nuestra democracia y nuestro estado de Derecho'.

'Estoy seguro de que su testimonio nos va a enriquecer, su memoria nos va a hacer mejores; hoy es un día para que la democracia llore a alguien que dejó mucho empeño para que vivamos en un país de libertades', dijo Zapatero en el Congreso.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, le definió como una persona de 'principios y valores arraigados' que siempre actuó en político 'conforme a convicciones'. Rajoy, en declaraciones a los periodistas tras asistir a la capilla ardiente instalada en el Congreso, ensalzó el papel que desempeñó Calvo Sotelo para recuperar la 'normalidad' en una de las etapas 'más complicadas de la historia de España', como fue el golpe militar del 23-F. 'Es una pérdida que ya no se puede recuperar, pero nos queda su magisterio, su enseñanza y su historia, y por eso está en el futuro de España', comentó Rajoy.

Para el líder del PP, Calvo-Sotelo era una persona de 'una enorme experiencia y de unos grandes conocimientos y uno de los políticos más importantes que ha dado España en los últimos años'.

Para el hijo de Suárez, Adolfo Suárez Illana, Calvo-Sotelo fue 'el presidente del Gobierno de mayor talla intelectual de nuestra democracia', destacando su brillantez en el debate parlamentario.

Por su parte, la ministra de Educación y sobrina del ex presidente Leopoldo Calvo Sotelo, Mercedes Cabrera, destacó que se trata de 'una figura irrepetible, por lo que le correspondió hacer desde el punto de vista político en bien de la democracia en este país'.

En declaraciones en el patio del Congreso de los Diputados recordó que se trataba de un día triste para la familia, 'que es la mía', y para todos los ciudadanos que han vivido la transición a la democracia. Además, añadió, el ex presidente fue 'una persona única desde el punto de vista personal en sus relaciones familiares', al ser 'culta, inteligente con mucho sentido del humor, muy irónico y un excelente conversador, al que le encantaba contar historias'.

Tras la capilla ardiente y los tres días de luto oficial decretados por el Gobierno, el rey Juan Carlos presidirá los funerales de Estado el próximo jueves en la catedral de La Almudena. Los restos mortales de Calvo-Sotelo serán enterrados hoy en Ribadeo (Lugo).

El presidente más empresario

Representantes del mundo de la empresa y la economía quisieron ayer dejar patente su profundo respeto y admiración por Calvo-Sotelo, el jefe de Gobierno de la democracia que mejor ha conectado con el mundo empresarial. Fue consejero delegado de Unión Española de Explosivos, presidente del consejo de Renfe, consejero de La Seda y del Banco Hispano Americano. Pedro Solbes, ministro de Economía y Hacienda, le definió como un hombre 'con criterios claros, con gran visión del país y con un gran sentido del humor, cosa que a veces no parecía, pero los que le hemos tratado lo sabíamos'. Nicolás Redondo, ex secretario general de la UGT, le recordó como 'un hombre afable, cultivado y con un profundo sentido del humor'. Efe rescató ayer una frase de Calvo-Sotelo sobre el desempleo: 'Allí donde existen políticas monetarias y presupuestarias holgadas, por no decir expansivas, no hay menor inflación sino mayor crecimiento de los precios y no hay mayor ocupación sino más paro'.

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