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Tribuna
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Los nuevos límites de la empresa

La globalización de la economía está redefiniendo las compañías europeas tal y como las hemos conocido. El mundo de los negocios vive un proceso de transformación y afronta una nueva era en la que cualquier cambio que acontece en el mercado se produce a una velocidad vertiginosa. Son muchos los ejecutivos que reconocen que este nuevo escenario no ha hecho sino generar una mayor intensidad competitiva. En medio de toda esta vorágine, las redes empresariales (ecosistemas de empresas que se constituyen en favor de la colaboración y la coinnovación) se erigen como el mejor recurso de una organización para ponerse un paso por delante de su competencia.

El nacimiento de estas redes trae consigo una nueva manera de abordar las alianzas entre corporaciones. En realidad, estamos asistiendo al cambio del modelo de colaboración en el que se han apoyado tradicionalmente las organizaciones con partners, proveedores y clientes. La tecnología ha madurado hasta el punto de hacer posible que colaboración y coinnovación entre empresas sea una alternativa económicamente viable. Sólo las que compartan inversiones, bienes e ideas serán capaces de aportar innovación a sus clientes con la suficiente rapidez y a unos costes rentables.

Cada 3,5 minutos sale al mercado un producto nuevo. Cada 20 segundos se produce en el mundo una adquisición… En este contexto, las compañías de primer orden están obligadas a optimizar su cadena de valor mediante una cooperación mucho más estrecha a fin de poder suministrar servicios perfectamente integrados. Pero, ¿cuáles son las grandes tendencias que están marcando esta transformación? Algunas de ellas han sido recogidas por McKinsey en su informe Goblal Business Survey:

- El poder en manos del cliente: su influencia en el diseño y entrega de productos y servicios es cada día mayor.

- Nuevas dinámicas de empleo: externalización de plantillas por las economías desarrolladas para afrontar el déficit de profesionales (information workers).

- Nueva red global e integrada de mercados financieros: récord de fusiones y adquisiciones, superándose en Europa los niveles registrados en 2005 en un 77%.

- Una regulación y cumplimiento de normativas sin precedentes.

- La integración de las tecnologías de la información (TI) como un elemento más de la estrategia corporativa.

La evolución de los ecosistemas empresariales está produciéndose a escala mundial y afecta también a las industrias europeas. Muestra de ello es la proliferación de fusiones, la externalización de tareas, la coinnovación en el desarrollo de productos y procesos, la creación de canales y el nacimiento de nuevos mercados. La mayoría de estas organizaciones ya están trabajando activamente en la expansión de sus redes, incrementando la visibilidad ante los partners, mejorando la gestión de las inversiones en sus alianzas estratégicas y compartiendo las mejores prácticas más allá de las cuatro paredes de la empresa. No obstante, esta transformación no habría sido posible sin la flexibilidad que las TI han aportado a las organizaciones.

Son muchos los ejemplos que apoyan esta teoría. Gracias a su infraestructura TI, Coca-Cola ha sido capaz de reinventar la relación que mantiene con los embotelladores hasta el punto de presentar ambas organizaciones como una única cara frente a toda su red de retailers mundial. Kimberly Clark, multinacional líder en productos de higiene y salud, ha sido capaz de reducir a la mitad el ciclo de vida de innovación de sus productos gracias a la colaboración con sus socios externos y mediante el uso de nuevas aplicaciones. Heineken, Whirpool o Burda Media son sólo algunos ejemplos más de cómo otras multinacionales han reinventado sus modelos de colaboración en pos de una mayor ventaja competitiva.

Pero, ¿qué pautas debe seguir una organización para establecer una red empresarial ventajosa en la economía actual? Principalmente, ha de evolucionar el negocio en torno a tres a ejes:

Red de recursos. Las organizaciones han de especializarse en los aspectos que son críticos para su diferenciación en el mercado y dejar en manos de sus socios tareas secundarias.

Red de procesos. Se trata de trabajar conjuntamente como una entidad uniforme, compartiendo incluso las definiciones de los procesos que son comunes.

Red de conocimientos. La innovación ya no es sólo una cuestión interna. Es necesario promover comunidades compuestas por clientes, partners, proveedores y profesionales individuales.

En el futuro, sólo aquellas firmas que sean capaces de establecer acuerdos de colaboración con sus partners para fortalecer su estrategia y de sincronizar con ellos los procesos empresariales tanto interna como externamente podrán alcanzar el liderazgo.

Erwin Gunst. Presidente de Operaciones y Soluciones para EMEA y miembro del consejo ejecutivo de SAP

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