Avilés proyecta la Isla de la Innovación
Potenciar la economía y dinamizar el urbanismo, objetivos claves del conjunto
Un espacio pensado para la cultura, la creatividad y la innovación. Con esta máxima, el presidente del Principado de Asturias, Vicente Álvarez Areces, y la alcaldesa de Avilés, Pilar Varela, junto a otros colaboradores del proyecto, presentaron ayer en Madrid un ambicioso plan de desarrollo económico y social que tratará de abrir Asturias al contexto internacional: la Isla de la Innovación.
Los promotores son el Gobierno del Principado de Asturias, el Ayuntamiento de Avilés, la empresa estatal Infoinvest y la Autoridad Portuaria de Avilés.
La superficie total sobre la que se desarrollará este proyecto constará de 572.000 metros cuadrados con una inversión, según señaló Álvarez Areces, de más de 40 millones de euros. En este territorio, situado junto a la ría de Avilés, confluirán el mundo de los negocios, el ocio y la cultura de forma que se pueda vivir y trabajar en un mismo espacio. Uno de los principales objetivos de esta iniciativa es la de constituirse como un importante polo de atracción para iniciativas económicas, culturales y sociales procedentes de todo el mundo.
'La Isla de la Innovación pretende liderar un importante proyecto de desarrollo urbano. Y las nuevas tecnologías serán la herramienta de cambio que permitirá que Asturias compita en el ámbito internacional', afirmó el presidente del Principado de Asturias.
El edificio principal y en torno al cual se desarrollarán el resto de proyectos será el Centro Cultural Internacional âscar Niemeyer, proyectado por este arquitecto brasileño (vinculado con esta tierra desde hace tiempo, ya que fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Artes en el año 1989). Este edificio albergará, además, la fundación que lleva también su mismo nombre.
El inicio de la construcción de este centro está previsto para el 12 de abril y se espera que esté terminado en un plazo de 16 meses.
Otros de los edificios claves de la isla serán el Palacio de América, pensado para acoger congresos, convenciones y actividades feriales, y el Parque Galería, que consiste en un espacio cuyas funciones futuras serán múltiples, como residenciales, de oficinas u hoteleras, entre otras.
El puerto de Avilés y su ría son otros de los grandes protagonistas de esta iniciativa asturiana. Un puerto deportivo y una terminal de cruceros completarán el atractivo de esta zona. La llamada Puerta de Avilés y un nuevo eje urbano en forma de bulevar abrirán la nueva construcción al resto de la ciudad.
Avilés vive una importante modernización y regeneración, tras los años en los que las dificultades en la industria marcaron su separación del resto del territorio. 'Estamos en un proceso de transformación tras la crisis industrial que sufrimos. Ahora estamos recuperando muchas de nuestras joyas, como la ría o el centro histórico', señala la alcaldesa Pilar Varela, quien recordó la importante inversión de 162 millones de euros que se destinaron a la limpieza de la ría. Un sistema ambiental propicio o el aeropuerto cercano son otros puntos claves para el éxito de este proyecto, según señaló Alfonso Vegara, presidente de la Fundación Metrópoli, uno de los principales colaboradores, junto a Sogepsa y la Fundación âscar Niemeyer.
El presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Enrique Martínez Robles, compareció en la presentación del proyecto para 'representar el apoyo del Gobierno del Estado a la iniciativa de este Ayuntamiento'.
En el mundo
Se trata de un proyecto único y original. Sin embargo, para su elaboración se han tenido en cuenta algunos referentes internacionales de gran éxito por las similitudes en las características del territorio.El ejemplo más cercano se encuentra a pocos kilómetros de distancia y es el Abandoibarra, en Bilbao, un centro cultural y de negocios en el corazón de la ciudad. Otros casos que se tuvieron en cuenta para la proyección de la Isla de la Innovación fueron Lyon Confluence, y Euronantes, en Francia; Hafencity, en Hamburgo (Alemania); el Fjord City de Oslo (Noruega) y Federation Square en Melbourne (Australia). Otros referentes fueron 'ciudades del agua' como Ámsterdam, Brujas, Gante o Estocolmo.