El líbor sufre la mayor subida desde los atentados del 11-S

El colapso de Bear Stearns ha incrementado aún más la desconfianza hacia el sector bancario. Tras la quiebra de una de las firmas más prestigiosas de Wall Street, en el mercado muchos se preguntan quién será la próxima víctima, un temor que se reflejó ayer en una mayor tensión en el mercado monetario.

Los bancos no se fían unos de otros. La porquería derivada de la crisis subprime sigue pululando por el sistema financiero sin que se sepa con claridad en manos de quién están los activos más peligrosos. Una incógnita que incrementa los costes de financiación y distorsiona el mercado monetario ante la reticencia de los bancos a prestarse dinero entre sí.

La mayor tensión se reflejó ayer en el líbor. Así, la tasa a un día a la que se prestan dólares los bancos en el mercado de Londres llegó a repuntar 80 puntos básicos -un incremento no visto desde el 11 de septiembre de 2001- hasta situar el tipo en el 3,82%.

En el resto de Europa, el miedo a que los problemas de Bear Stearns desaten una espiral de víctimas se hizo sentir. Así, pedir prestado en euros también se encareció ayer.

La cotización del euríbor a 12 meses, tasa a la que se calculan la mayoría de las hipotecas en España, repuntó el 0,52% ayer hasta situarse en el 4,63%, un nivel muy alejado del 4% al que cotizan los tipos de interés en Europa y de la horquilla entre el 4,15% y el 4,20% al que debería cotizar en una situación de normalidad. El euríbor a 3 meses, por otra parte, repuntó aún más, un 0,76% hasta el 4,65%.