Las reestructuraciones salvan los resultados de la industria del motor
Los analistas esperan ventas planas en Europa y EE UU, compensadas por el área BRIC
Los grandes grupos occidentales dedicados a la fabricación y venta de automóviles salen del bache gracias a los efectos de los planes de reestructuración. Seis de los ocho grandes fabricantes europeos y estadounidenses de vehículos a motor lograron mejorar el beneficio durante el pasado ejercicio.
Y la situación debería mejorar todavía más durante el presente año, a pesar del previsto estancamiento de las ventas en el mercado europeo y estadounidense. La agencia de calificación de riesgos Standard & Poor's prevé que 'los programas de reestructuración y ahorro de costes lanzados por casi todos los fabricantes europeos en los últimos dos años muestren algunos efectos positivos sobre la rentabilidad' Así, según la prestigiosa institución, 'la mejorada eficiencia y los menores gastos de capital deberían apoyar también la generación de caja' de las compañías. Este esfuerzo se ve en el empleo. Desde 2001, la industria ha destruido 82.702 puestos de trabajo en la UE de los 15, según la patronal ACEA, hasta 1,88 millones de puestos. Estos empleos se trasladan al Este: en los nuevos estados miembros, se han creado en el mismo lapso 177.652 empleos, hasta 422.303.
Estructura ligera
Desde 2001, las empresas han eliminado 82.702 empleos en la UE de los 15 y han creado 177.652 en Europa del Este, según ACEA
Las empresas necesitan de una estructura de costes más ligera, toda vez que las ventas en los mercados tradicionales parecen haber tocado techo. 'Para 2008 esperamos', asegura S&P, 'que el mercado europeo en general siga estancado, con previsibles descensos en España y el Reino Unido por la caída de los precios del sector inmobiliario y las pobres tendencias en la confianza de los consumidores'. La alternativa es el área BRIC (Brasil, Rusia, India y China) , que ya suponen el 20% de las ventas totales.
La debilidad que están mostrando el dólar y el yen frente al euro también representa un 'reto para los fabricantes orientados a la exportación y una escasa implantación productiva global'. El impacto del tipo de cambio, eso sí, no debería ser demasiado sangrante. 'Todas las compañías han mejorado su cobertura financiera', sentencia.
Los casos más palpables de los efectos de la tijera han sido los de Volkswagen y PSA Peugeot Citroën. Bernd Pischetsrieder, el antecesor del actual presidente del consorcio alemán, Martin Winterkorn, emprendió un duro ajuste que se centró en buena medida en Alemania. Los efectos comenzaron a verse en 2006 y deslumbraron el año pasado: la multinacional tuvo un beneficio de 4.122 millones en 2007, el 49,9% más.
El nuevo presidente de PSA, Christian Streiff, inició a finales de 2005 una programa para reflotar el decadente negocio del grupo. Las medidas incluyeron la eliminación de 10.000 empleos. El pasado año, PSA logró unos beneficios de 885 millones, lo que supone multiplicar casi por cinco los 183 millones de 2006. Incluso BMW, uno de los más rentables, decidió el mes pasado prescindir de 8.100 de sus empleados totales. El lado negativo lo pusieron las firmas estadounidenses, si bien hasta en las malas noticias hay lecturas positivas. GM perdió 38.700 millones de dólares, es decir, 24.866 millones de euros al cambio. Sin embargo, buena parte de esta merma, la mayor de su historia, se produjo por la amortización de créditos fiscales que probablemente no logre activar dadas las malas perspectivas. Excluida esta partida, las pérdidas se limitarían a 23 millones de dólares (15,8 millones de euros), el 98% menos.
La Bolsa retira la confianza al sector
Los fabricantes de coches no pueden, en lo que va de año, repetir el buen ejercicio bursátil que experimentaron en 2007. Las empresas europeas del sector han perdido el 19,45% de su cotización desde que comenzó 2008, con la práctica totalidad de los valores en rojo, con la sola excepción de Volkswagen, que gana un exiguo 0,33%.En 2007 la situación era bien distinta: la industria fue la segunda que mejor comportamiento registró en el Euro Stoxx, con una revalorización conjunta del 24,4%. En EE UU, las cosas no han cambiado tanto: GM pierde en lo que va de ejercicio el 23% de su valor en Bolsa, frente a la merma del 18,98% registrada en 2007. Ford, por su parte, se deja un 21% del precio de sus acciones durante este 2008, frente al 10,39% de depreciación en 2007.Este año, la peor parada ha sido la compañía francesa Renault. La empresa que preside Carlos Ghosn lanzó hace dos años un ambicioso plan de rentabilidad y calidad llamado Contrato 2009 que sólo ahora empieza a dar sus frutos. El beneficio sufrió un retroceso del 7,6% en 2007, pese a que el directivo aseguró que su proyecto marcha según lo previsto.Fiat también registra un retroceso, del 28,2% en su caso. La compañía que dirige Sergio Marchionne, sin embargo, ha recuperado buena parte del lustre perdido a principios de la década, con lanzamientos exitosos como el del nuevo 500 o el nuevo Punto y un beneficio ya consolidado en el color negro que creció el 78,5% en 2007.De la quema no se salvan ni las marcas de lujo. BMW, con una caída del 21,9%, ha sido la envidia de sus rivales durante pasados ejercicios. Daimler pierde el 19,3%, pese a haberse librado del lastre de Chrysler.