Prorrogar gratis la hipoteca costará al erario 78 millones
Poner en marcha una de las propuestas estrella de la pasada campaña electoral, como fue el compromiso del PSOE de permitir a las familias con mayores dificultades ampliar gratis el plazo de su hipoteca, tendrá un coste anual para el erario público de al menos 78 millones de euros, según las operaciones de este tipo registradas en 2007.
El vicepresidente económico en funciones, Pedro Solbes, anunció recientemente que el nuevo Ejecutivo entablará en las próximas semanas negociaciones con las entidades financieras, los notarios y los registradores, los tres colectivos afectados por esta iniciativa, para tratar de alcanzar un acuerdo que permita su desarrollo.
Según los cálculos efectuados por el Ministerio de Economía, el coste medio que tiene para una familia ampliar el plazo de su hipoteca oscila en torno a los 1.000 euros, que incluyen tasas y aranceles notariales y de registro; impuestos y comisiones bancarias. No obstante, es en ésta última partida donde se pueden producir los mayores descuentos, ya que la mayor parte de las entidades financieras acuerdan con sus clientes reducir esos pagos, e incluso, eliminarlos.
En cuanto al coste que tendrá esta medida para las arcas públicas, fuentes oficiales eluden dar una cifra, pero según los cálculos efectuados por CincoDías, atendiendo al volumen de operaciones de este tipo que se registraron el año pasado, la factura anual podría ascender, al menos, a 78,7 millones de euros.
Según la estadística sobre hipotecas que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2007 un total de 321.425 préstamos hipotecarios cambiaron sus condiciones.
De ellos, el 51,4%, un total de 165.134, se debieron a modificaciones en los tipos de interés, y 78.738 variaron el plazo de amortización. Aunque el INE no especifica en su estudio si esa modificación de los plazos es ampliación o reducción, lo lógico es pensar que mayoritariamente se trate de ampliaciones, ya que en el actual entorno de tipos hipotecarios al alza es uno de los instrumentos que tienen los hogares para poder reducir la cuota mensual a pagar, confirman fuentes del sector.
Por tanto, una forma de calcular de manera aproximada el coste de este proyecto es multiplicar el número de operaciones por ese gasto medio de 1.000 euros estimado por Economía, lo que da como resultado esos 78,7 millones.
El objetivo es aliviar la situación de las familias que contrataron su crédito a tipo variable en 2003, cuando el euríbor se encontraba en sus niveles mínimos (en torno al 2%). Desde entonces, este indicador, al que están referenciadas la mayoría de las hipotecas, ha escalado hasta el 4,5%, lo que se ha traducido en importantes incrementos de unos 180 euros de media al mes en las cuotas de numerosas familias.
La única forma de conseguir rebajas significativas en dichos pagos es, a la espera de que el BCE decrete el abaratamiento del precio del dinero, o bien renegociar con el banco o caja un menor tipo hipotecario o un plazo de amortización superior.
La renegociación de los tipos parece estar siendo la opción preferida por las familias hasta el momento, pero en la medida en que el euríbor se estabilice en el 4,5%, el actual margen de maniobra se reduce y ya sólo cabe esperar rebajas prorrogando el plazo de amortización.
Operaciones en permanente revisión
A la espera de conocer cuáles serán los criterios que determinará Economía para que los hogares puedan beneficiarse de la gratuidad de la operación, bancos, notarios y registradores discrepan sobre el coste que ésta tiene. Además, recuerdan que la última reforma de la ley hipotecaria ya incluye cuantiosas rebajas.Desde 1994, las entidades financieras no pueden cobrar más del 0,1% de comisión por novación (cambios en las condiciones del préstamo con el mismo titular e idéntica entidad). Además, si existe acuerdo entre partes, esa comisión suele eliminarse.Los actos notariales en novaciones se consideran 'documentos sin cuantía', por lo que tienen un coste fijo de 30 euros. Por ello, desde el Consejo General del Notariado cifran el gasto que supone ampliar el plazo de amortización de una hipoteca en unos 80 euros. El arancel registral para idéntico trámite asciende a 24 euros si el capital pendiente de amortización es inferior a 60.000 euros y sube a 48,5 euros si la deuda se eleva a 200.000 euros. Por todo ello, consideran que estos gastos no disuaden a nadie a la hora de valorar si prorrogan o no el préstamo. De hecho, el mayor coste es el fiscal, ya que estas operaciones tributan por actos jurídicos documentados (AJD), una carga que estuvo a punto de eliminarse en la reforma de la ley hipotecaria y no se hizo por la negativa a perder recursos de las comunidades autónomas.Según los simuladores que están disponibles en numerosas páginas web, en un entorno de tipos hipotecarios como el actual, en el que oscilan entre el 5% ó 5,5%, aún se consiguen rebajas significativas ampliando el plazo. Así, para una hipoteca de 150.000 euros al 5,5%, mientras a 20 años se pagaría una cuota de 1.032 euros al mes, a 30 años se reduciría a 852.