El crudo marca su sexto récord seguido, a más de 107 dólares el barril
Nadie es capaz de poner techo al precio del petróleo que sigue en una espiral alcista que parece imparable. El precio del barril de Brent -de referencia en Europa- suma seis sesiones consecutivas marcando máximos. Ayer, alcanzó 107,88 euros, un nivel nunca visto. Hay distintos argumentos para explicar esta situación. Algunos expertos apuntan que la debilidad del dólar -ayer el euro alcanzó un máximo al cambiarse por 1,56 dólares- provoca que se abarate el petróleo para aquellos que utilizan otras monedas como el euro, lo que espolea la demanda de crudo.
'Es la historia de siempre, el dólar cae a niveles récord y el petróleo sube y marca otro récord' dijo Tom Bentz, broker de BNP Paribas en la ciudad de Nueva York. Por otra parte, la decisión de la semana pasada de la Organización de Países Exportadores de Petróleo de no variar la producción de petróleo tal y como pedía Estados Unidos también está presionando al alza el precio. Además, el aumento de la demanda de economías pujantes como China o India también contribuye al encarecimiento de la principal fuente energética del mundo. De hecho, en los últimos doce meses, el Brent se ha encarecido en torno al 75%.
Por su parte, el barril de Texas, también logró ayer un nivel histórico. Tocó 111 dólares, aunque después se frenó y retrocedió. Desde principios de año, el Texas ha subido más de un 10%. Todo ello no hace sino empujar la inflación en Estados Unidos y extender el temor a una posible recesión. Uno de los mayores bancos del mundo, Citigroup, apuntó que la 'agresiva política monetaria de la Reserva Federal -los tipos han pasado del 5,25% en septiembre de 2007 al 3% actual- ha beneficiado principalmente a casi todas las materias primas, tanto agrícolas como energéticas.
Trichet, con la vista puesta en los precios
En su boletín de marzo, el Banco Central Europeo expone que decidió mantener los tipos de interés en el 4% la semana pasada 'por la existencia de fuertes presiones alcistas a corto plazo sobre la inflación'. Por otra parte, la máxima autoridad monetaria sostiene que los fundamentos económicos de la zona euro son sólidos a pesar de que la semana pasada revisó a la baja sus previsiones de crecimiento. Así, Jean-Claude Trichet, presidente del BCE, sigue sin moverse un ápice de su postura oficial y recuerda que lograr la 'estabilidad de los precios' es su objetivo.