Siemens quiere recortar unos 2.000 empleos en Alemania y otros 2.000 en el extranjero, mientras suprimirá los restantes 3.000 puestos de trabajo a través del traspaso a empresas externas.
En la división de Telecomunicaciones de Siemens, que está a la venta, trabajan unas 17.500 personas en todo el mundo.