Hacienda lleva ante el Constitucional la Ley de Patrimonio de Navarra
Como en una familia, el Ejecutivo central y el de Navarra andan a la greña por las herencias intestadas (sin testamento). Navarra considera que, en su territorio, aquellas herencias que no han sido reclamadas pertenecen a la comunidad foral. El Estado discrepa y ha recurrido al Constitucional.
La disputa sobre a quién pertenecen las herencias intestadas sin reclamar ha roto siete meses de entendimiento entre el Gobierno central y el navarro. Desde que los socialistas permitieron con su abstención que Miguel Sanz, de UPN, fuera reelegido presidente, ambos ejecutivos terminaban todas las reuniones con acuerdos. Con todo, las dos partes confían en que esta divergencia puntual no rompe las buenas relaciones actuales.
El recurso de inconstitucionalidad que acaba de presentar la Abogacía del Estado, argumenta que dos artículos de la Ley Foral de Patrimonio de Navarra, aprobada en 2007, se 'apropian de competencias exclusivas del Estado al atribuirse la propiedad de los inmuebles vacantes y de los saldos y depósitos abandonados', bien por fallecimiento sin herederos o por ausencia de titular conocido.
La cuantía que ingresa el Estado por herencias intestadas es, en relación al tamaño del sector público, irrelevante. De 2000 a 2006, el Estado ha obtenido por este concepto unos 33 millones de euros y se han producido unas 600 liquidaciones.
A pesar de la residual importancia económica de las herencias intestadas, la Junta de Cooperación que se formó para solventar la discrepancias entre ambos gobiernos el pasado mes de julio no logró un acuerdo. Y eso, que en los últimos meses se han alcanzado consensos en temas de mayor calado como la inversión y recorrido del Tren de Alta Velocidad que unirá Zaragoza con Pamplona, el Convenio Económico o la retirada por parte de Ejecutivo navarro del recurso de inconstitucionalidad que pesaba sobre la Ley de Dependencia.
Fuentes del Gobierno navarro se muestran extrañadas por la falta de sintonía en un tema que consideran 'menor'. Por un lado, porque el llamado Fuero Nuevo de Navarra (código civil), de 1973, ya dice que los bienes intestados no reclamados pertenecen a la comunidad y, por otra, porque actualmente es la comunidad foral quien se hace cargo de este tipo de bienes.
El presidente navarro se limitó a decir que 'lamenta' la actitud del Gobierno y se mostró conciliador. Fuentes de la administración navarra no descartan que, finalmente, el Gobierno retire el recurso de inconstitucionalidad.
En Cataluña, cuyo derecho civil también reconoce a la Generalitat como heredera en sucesiones sin testamento, existe una situación intermedia. Las herencias de personas que murieron antes de 1984 pertenecen al Estado y después de esta fecha es competencia de la Generalitat.
Tanto el Estado, como Navarra o Cataluña, han fijado que las herencias intestadas deben repercutir en el bien común. Así, una tercera parte de las herencias que acaban en manos del Estado deben destinarse a instituciones municipales del domicilio del difunto, otra tercera parte, a instituciones provinciales de carácter social y la parte restante se ingresa a la Caja de Amortización de la Deuda pública, salvo que el Consejo de Ministros acuerde una aplicación distinta.
El primer recurso del Gobierno ante el alto tribunal en 2008
El recurso de inconstitucionalidad que presenta el Gobierno contra dos artículos de la Ley Foral de Navarra es el primero del Ejecutivo contra una ley autonómica en 2008. Sin embargo, los datos del Tribunal Constitucional demuestran que en los últimos años las comunidades han sido más activas que el Gobierno a la hora de presentar recursos. En 2006, las comunidades presentaron nueve recursos, por tres del Gobierno. Si bien es cierto que estos datos están marcados por la aprobación de la reforma del Estatuto catalán, que recibió siete recursos de inconstitucionalidad, el 39% del total. Desde el Ejecutivo navarro aseguran que actualmente el único punto de desacuerdo significativo con la administración central es acerca de la pertenencia de las herencias intestadas y bienes abandonados. En lo demás, incluido el espinoso tema de la financiación, hay acuerdo al menos hasta el 2009.
La Administración premia a quien descubra bienes de personas fallecidas
Para evitar que cuentas bancarias, terrenos o viviendas permanezcan abandonadas, el Estado incentiva a que los ciudadanos comuniquen la existencia de bienes sin dueño. Aquellas personas que avisen a la administración de la existencia de herencias que nadie ha reclamado tendrán derecho al 10% de esos bienes. Para evitar estas situaciones de abandono, papeleos y eternas disputas familiares, los notarios recomiendan hacer testamento. Ante la ausencia de él se aplica el Código Civil: los primeros en la lista para heredar son los hijos y nietos del difunto. Le siguen padres, abuelos y el cónyuge del finado. Los parientes de hasta cuarto grado son los últimos con legitimidad para heredar. Si no aparece ninguno de estos familiares es el Estado quien se hace con todos los bienes del difunto. La legislación civil propia de Navarra extiende el derecho a heredar hasta los parientes de sexto grado.