El Presupuesto del 'pato cojo'

El Presupuesto del presidente Bush para 2009 es un triste tour guiado a través de sus prioridades fuera de lugar, las políticas fiscales fallidas y el legado desastroso que dejará al próximo presidente. E incluso esas cuentas requieren que uno acepte la optimista contabilidad de la Casa Blanca y siete años de experiencia nos dice que eso sería absurdo en extremo (...).

Como era previsible, los grandes perdedores en el Presupuesto de Bush son los programas de gasto nacional, incluyendo la investigación médica, la protección al medio ambiente y la educación, que mantendrán el mismo gasto que el año pasado o menos.

Incluso más previsible, la mayor parte de lo que Bush llama ahorros vienen de los programas para proteger a los ciudadanos más vulnerables: los mayores, los pobres o los discapacitados. El Presupuesto reducirá drásticamente el crecimiento del gasto en Medicare (...).

Todo eso significa que Bush dejará a su sucesor una sobrecogedora lista de problemas: el siempre creciente coste de la sanidad, los millones de personas sin seguro y un estamento militar con una desesperada necesidad de reconstruirse. Gracias a la actitud derrochadora de Bush, el próximo presidente tendrá incluso menos dinero para solucionarlos.