Daños a los madrileños
Hay mucho divertimento en seguir la bronca y los desencuentros que cada día protagonizan la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el alcalde de la villa, Alberto Ruiz-Gallardón. Fotógrafos, camarógrafos de televisión, periodistas, todos observan al milímetro los momentos en que se produce la coincidencia de ambas estrellas en un acto determinado. El de la entrega de premios a los jóvenes empresarios en la sala Florida del parque del Retiro es el último ejemplo. Todos están pendientes de si se saludan, si se dan la mano, si fruncen el ceño, si expresan relajación o encabronamiento, si se hablan, si su lenguaje corporal desmiente sus palabras y de todos estos signos derivan sesudas consideraciones sobre la temperatura del conflicto político en el que andaban Esperanza y Alberto antes del descarte del edil para las listas de la candidatura al Congreso de los Diputados y en el que siguen con más ganas si cabe después.
La bronca, su escenificación pública, permitiría el lucimiento del doctor Gustavo Leoz en una edición corregida y aumentada, que ya estamos impacientes por leer, de sus certeros trabajos sobre La expresión y la mirada. Pero más allá y más acá de las frivolidades de los medios de comunicación o de los estímulos para el trabajo científico de nuestro oftalmólogo de cabecera, debemos hacer una evaluación sobre lo que se denomina el daño emergente y el lucro cesante de los madrileños como resultado de unos desencuentros por completo disfuncionales para el progreso de nuestra ciudad.
El alcalde pondera la posibilidad de abandonar su puesto, una vez concluidas las elecciones, para evitar que su decisión se utilice. Sus adversarios quieren cerrarle ese camino del desistimiento con el argumento de que ese proceder sería una traición a sus votantes. Son posiciones para la esgrima dialéctica pero lo que está en juego averiguar es si continuar en la alcaldía tiene algún atisbo de funcionalidad en el marco de los bloqueos que puede ejercer la presidenta de la CAM.
De ahí el interés por examinar la relación de asuntos, por ejemplo, de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid que están pendientes de aprobación por el Consejo de Gobierno de la CAM sin motivo aparente, entre las que se encuentran las siguientes modificaciones puntuales del PGOUM-97:
-La referente a la 'Cornisa de San Francisco- Seminario' en el distrito Centro en el ámbito del nuevo APR 01.16 (Exp. 10/CU-00233.5/2007).
-La sección segunda de 'Planes Especiales' del capítulo 4.10 y el artículo 4.3.13.4 'Condiciones para las obras de las nuevas edificaciones' (Exp. 10/CU-00217.5/2007).
-Las condiciones para la actuación en los patios de manzana y espacios libres (Exp. 10/CU-00218.6/2007).
-La transformación de las instalaciones de Boetticher en el distrito de Villaverde (Exp. 10/CU-00235.7/2007).
-El mercado de frutas y verduras en el distrito de Arganzuela (Exp. 10/CU-00234.6/2007).
-La modificación de la calificación y de las condiciones de catalogación del edificio sito en el paseo de la Castellana número 19 (Exp. 10/CU-00293/2007)
-La modificación de las condiciones del ámbito de la parcela sita en calle Antonio López 109-111 APE 12-11.
Además del bloqueo de la CAM a las actuaciones a emprender en relación con el citado PGOUM-97, derivadas de la sentencia número 216 del Tribunal Superior de Justicia de Madrid de 27 de febrero de 2003, casada parcialmente por la sentencia del Supremo de 3 de julio de 2007.
Todavía habría que enumerar las medidas del programa electoral para el Ayuntamiento de Madrid que necesitan la colaboración de la CAM y que padecen el mismo bloqueo, pero esa tarea queda para los que asistan a clase el próximo viernes. Vale.
Miguel Ángel Aguilar. Periodista