El barril de Texas baja por primera vez desde diciembre de los 90 dólares
El petróleo del Mar del Norte cosechó esa subida tras llegar a venderse por 85 dólares, en la resaca del "lunes negro" en las bolsas europeas, que se desplomaron ayer por el temor a que la economía estadounidense entre en recesión y arrastre a Europa.
Al igual que los índices bursátiles europeos, que comenzaron la jornada a la baja y cerraron al alza animadas por el anuncio de la Reserva Federal estadounidense de recortar los tipos de interés en 0,75 puntos porcentuales, el Brent terminó la jornada con ganancias.
Por su parte, el precio del barril de crudo de Texas finalizó hoy la sesión a menos de 90 dólares, por primera vez desde el 10 de diciembre, entre una mayor inquietud por una posible recesión económica en EEUU que podría afectar a otros países y a la demanda de crudo y de combustibles.
Al cierre de la sesión regular en la Bolsa Mercantil de Nueva York (NYMEX), los contratos de Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en febrero, que expiraron hoy, quedaron a 89,85 dólares el barril, después de restar 72 centavos al precio anterior.
Mientras la Fed llevaba a cabo el mayor recorte en más de dos décadas, que deja las tasas en el 3,50 por ciento -el nivel más bajo desde septiembre de 2005-, el presidente estadounidense, George W. Bush, negocia con el Congreso un plan de medidas para reactivar la economía.
La OPEP reconoció hoy que "la incetidumbre" repercute en el crecimiento de la demanda "debido al aumento de los temores a una recesión en los Estados Unidos y a una desaceleración económica en otras regiones".
Sin embargo, mantuvo su pronóstico sobre la demanda mundial de crudo para 2008 en 87,1 millones de barriles diarios (mbd), sin cambios desde el mes pasado.
"Las débiles perspectivas económicas en medio de crecientes temores a una recesión en los Estados Unidos" empujó a la baja el precio del crudo OPEP hasta los 85,34 dólares por barril, indicó el cártel.
Los precios mundiales del petróleo están hoy por debajo de la marca de los 90 dólares, siguiendo la estela bajista de las bolsas por la posible caída de la demanda de energía por los temores de una desaceleración económica.