La ley antitabaco española suspende en Europa
Una investigación comunitaria insta al Gobierno a subir el precio de los cigarrillos y a endurecer la legislación
æpermil;l no lo sabía y, probablemente, tampoco le hubiera importado, pero cuando Humphrey Bogart apuraba con aire seductor su sempiterno pitillo ingería y luego expulsaba en cada calada 400 partículas por millón (ppm) de monóxido de carbono, una sustancia nociva para el cuerpo que guarda relación con problemas pulmonares y cardiovasculares. Ahora, un estudio de la Unión Europea ha relacionado el nivel de monóxido de carbono de los europeos con el precio del tabaco y con la dureza de la legislación en cada Estado miembro.
Las conclusiones del estudio, realizado en el marco de la campaña HELP- Por una vida sin tabaco, ha determinado que allí donde las legislaciones son más restrictivas, el nivel de monóxido de carbono entre la población es menor. La polémica ley antitabaco española se sitúa en el decimoquinto lugar en cuanto a sus niveles de calidad y efectividad respecto a la Europa de los 27: obtiene un puntuación de 45 sobre 100. Lidera el ranking Irlanda y en último lugar se sitúa Luxemburgo. Los doctores Carlos A. Jiménez Ruiz y Juan Riesco Miranda -expertos en tabaquismo de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica- presentaron el informe ayer en Madrid y exhortaron a las autoridades a prohibir 'totalmente' fumar en cualquier lugar público.
Según el estudio, el nivel de monóxido de carbono es alto en ciudadanos no fumadores que residen en países sin prohibición de fumar (5,2 ppm) y desciende en países con fuertes controles sobre el tabaco (2,5 ppm). Se considera que a partir de 8 ppm hay riesgo en la salud. El monóxido de carbono es un componente normal, pero 8,5 ppm se considera el nivel máximo aceptado para la calidad del aire. Entre los fumadores, la media de monóxido de carbono es de 17,5 ppm. Estos datos se han obtenido tras realizar 115.835 cooximetrías, una prueba que consiste en soplar en un aparato parecido a un alcoholímetro que determina la cantidad de monóxido exhalado en la prueba.
España es el octavo estado miembro con un nivel más alto de monóxido de carbono entre sus ciudadanos. Los más sanos son los finlandeses y los suecos y los que presentan mayores dosis de monóxido Grecia, Bulgaria y Lituania.
A pesar de que los fumadores suelen quejarse del precio del tabaco, el estudio establece que en España las cajetillas son baratas en relación al PIB del país, ya que ocupa el puesto decimoséptimo, un lugar 'desproporcionado' según defiende el estudio.
Así, el informe insta al Gobierno a aumentar los impuestos sobre el tabaco. Según el doctor Jiménez Ruiz, hay una relación entre el nivel de monóxido de carbono en el cuerpo humano y el precio de las cajetillas. En España, el precio medio es de 2,95 euros, mientras que en la Unión Europea, alcanza los 3,48 euros.
Soria acusa a cuatro comunidades
Por otra parte, el ministro de Sanidad y Consumo, Bernat Soria, aseguró ayer que cuatro comunidades autónomas -Madrid, Valencia, Castilla y León y Baleares- quedarán fuera del reparto de nueve millones de euros que el Gobierno central destinará para ayudar a las regiones a implementar la Ley Antitabaco. Sanidad considera que no tiene sentido ayudar a unas comunidades que han legislado en contra de la Ley aprobada por el Congreso. Desde el ministerio aseguraban ayer que es una decisión no partidista, pues Baleares, gobernada por el PSOE, no recibirá la ayuda hasta que no adecue su legislación a la ley.
El rey cigarro
El puro o la pipa se asocian a cierta sofisticación y elegancia pero el cigarrillo, sigue siendo el rey a la hora de consumir tabaco. El 94% de los consumidores de tabaco en España, según el estudio HELP - Por un mundo sin tabaco, fuman el popular cigarrillo, 'seguido en segundo lugar por el hachís y después el puro'. En el informe se establece la edad media de los consumidores, según el último producto fumado antes de la encuesta. Los más jóvenes se decantan por el consumo de hachís (22,3 años de media) y por la pipa de agua -también conocida como cachimba- (20,5 años de media). En el lado opuesto, se sitúan los consumidores de puro, cuya media de edad es mayor a los 55 años. La tradicional pipa es el producto mediante el cual se introduce en el cuerpo humano una cantidad mayor de monóxido de carbono, seguido del puro. En este sentido, el produce menos nocivo es la pipa de agua, el tabaco de liar y el hachís. Por otra parte, en España el porcentaje de fumadores (18%) está por debajo de la media europea (36,3%). Por género, los hombres tienen un mayor consumo que las mujeres.