Demanda y especulación impulsan el petróleo hasta los 90 dólares
El petróleo en Europa alcanzó un nuevo récord al tocar durante la sesión de ayer los 90,3 euros. Los analistas consideran que es muy difícil que se puedan mantener esos niveles de precios a medio plazo y creen que la próxima subida de producción de la OPEP puede servir para rebajar parcialmente las tensiones.
Es posible que el barril de petróleo pueda llegar a 100 dólares? Esa es la pregunta que se hacen todos los analistas ante la incapacidad de prever los movimientos en la cotización del petróleo, que alcanzó ayer un nuevo máximo al superar los 90 dólares en Europa (Brent) y mantenerse cerca de esa cota en toda la sesión. El crudo en EE UU (West Texas) siguió esa tendencia y rozó los 93 dólares, empujado por la fuerte demanda de los países emergentes y la especulación en los mercados de futuros.
Los expertos consultados por Cinco Días consideran que hay que acostumbrarse a vivir con un petróleo caro, ya que todos los factores apuntan a que el precio va a seguir subiendo a corto plazo. José Luis Martínez Campuzano, analista de Citigroup, asegura que se puede llegar a superar la barrera de 95 euros, aunque no cree que se vayan a mantener en el tiempo. 'Las economías han sabido absorber el impacto de un crudo caro, siempre de forma puntual, asumiendo una rebaja en el dinero disponible de los hogares y de los beneficios de las empresas, más aún en una situación como la del pasado verano en la que coincidieron un crudo a precios históricos y una crisis de crédito por las hipotecas de alto riesgo'. Lo que no tiene tan claro es que 'si los efectos se convierten en estructurales', las empresas puedan verse tentadas a recuperar márgenes a través de los precios y provocar una espiral inflacionista.
Si este escenario se produce, tal y como señala Xavier Segura, director del Servicio de Estudios de Caixa Catalunya, puede haber variaciones en las decisiones de política monetaria del Banco Central Europeo, que en sus dos últimas reuniones ha abandonado la senda de subidas de tipos de interés en Europa emprendida desde diciembre de 2005. 'Si los precios siguen creciendo y superan la barrera considerada como deseable del 2%, el BCE puede variar su esquema de los últimos meses', dice.
La fuerte apreciación del euro frente al dólar ha permitido suavizar el impacto en la Unión Europea
Segura cree que la subida de medio millón de barriles diarios de crudo dictada por la OPEP, que se hará efectiva el próximo jueves 1 de noviembre, puede servir para aliviar las tensiones en los precios que, en su opinión, ya se han visto algo más rebajadas por la fuerte revalorización del euro y el dólar.
El euro está en máximos frente al dólar (ayer marcó un nuevo récord al llegar a los 1,443 euros por dólar) lo que permite a los países que no tienen petróleo, como España, comprar el crudo más barato y rebajar de forma significativa el precio que pagan por su factura energética. Si se compara la evolución de la cotización del barril de Brent, de referencia en Europa, el precio ha llegado a 90 dólares, mientras que si se compara el coste en euros, el precio no llega a 60 euros.
Un fenómeno del que se han beneficiado las economías europeas, que utilizan el euro, pero que tiene su otra cara: una escalada de los precios para los consumidores y una pérdida de competitividad vía precios para las empresas exportadoras. Un buen ejemplo es la evolución de Repsol YPF, cuya previsión de resultados ha empeorado en el tercer trimestre, ya que el incremento de del crudo (casi cuatro dólares en doce meses) no ha servido para compensar la fuerte depreciación del dólar frente al euro (que ha caído un 8% en el mismo periodo), según el último informe de Ibersecurities.
Gregorio Ordóñez, jefe del Servicio de Estudios del Instituto de Estudios Económicos, apunta otro efecto que puede provocar el alza del crudo: un menor crecimiento del PIB para 2008. 'El Ejecutivo había previsto en los presupuestos generales para 2008, un petróleo a 71,9 dólares, casi veinte por debajo de lo que esta ahora, y a 52 euros, ocho menos de su actual cotización', señala.
Dónde más va a sentir la economía española, a su juicio, el efecto de un petróleo caro es en los precios. 'El diferencial respecto a la UE (situado en seis décimas) puede verse acrecentado y provocar efectos como un aumento de los costes de producción, una pérdida de poder adquisitivo por parte de empresas y particulares y, en último término, destrucción de empleo', señala.
A todos estos factores hay que unir los factores geopolíticos, como la invasión de Irak por parte de Turquía, los planes nucleares de Irán, los desastres naturales de la temporada de huracanes o la enfermedad hecha pública ayer por el primer ministro de Israel, Ehud Olmert.
Los efectos de un crudo caro
Crecimiento desaceleradoAl consenso de los analistas de revisar a la baja la previsión oficial de crecimiento de la economía (3,3% en 2008) se le ha unido ahora la escalada de precios del crudo. El PIB de España crecerá, según los expertos, menos de lo previsto en 2008 por el alto nivel de dependencia energética.La inflación llegará al 3%Las subidas del precio de las materias primas y del petróleo han llevado a los precios en España a crecer un 2,7% en septiembre frente a los niveles de contención de los anteriores meses. Algunos analistas creen incluso que la inflación llegará al 3% en el mes de octubre.
Un déficit más abultadoUn petróleo caro hará aún más grande el agujero del déficit comercial. Las compras de productos energéticos suponen el 14% del total de las importaciones y el crudo representa el 10%. La previsión es que el déficit entre exportaciones e importaciones llegue a 100.000 millones este año.Mayor trasvase de rentasCada dólar por encima de los 71,9 dólares, la previsión oficial del Ejecutivo, supondrá un trasvase de mil millones de dólares hacia los países productores de petróleo, según los expertos. Con los precios actuales (la diferencia es de 18 dólares), el coste sería de 18.000 millones de dólares.Obstáculos para KiotoCumplir con el protocolo de Kioto también depende en parte del precio del petróleo. Medio Ambiente cree que este año será difícil de cumplir lo pactado en un escenario con el crudo muy caro, ya que se desincentiva el consumo de gas y aumenta el de carbón, más nocivo para la atmósfera.