Orden y colorido en BuyVip
A Gustavo García Brusilovsky le gusta trabajar en la funcional sala de reuniones
Orden y mucha delegación. Son los dos requisitos que necesita para trabajar Gustavo García Brusilovsky (Buenos Aires, 41 años), consejero delegado y cofundador de BuyVip, comunidad privada online que organiza ventas de producto de marca, y que opera en España, Alemania e Italia. Está contento con la compañía que gestó en 2005. 'Somos una empresa pequeña, con pocos empleados, que crecemos rápido y todo el mundo tiene mucha responsabilidad. Se trata de compartir las reglas de trabajo, con el fin de facilitar la organización'. En BuyVip ponen el foco en la obtención de los resultados finales. 'Todo el trabajo lo orientamos a conseguir algo, tanto a corto como a largo plazo', afirma este ejecutivo.
Pero la obtención de logros no está reñida con los horarios. 'No me gusta que la gente trabaje un montón de horas, no es productivo. Es mejor intentar hacer el trabajo en el horario previsto'. Aún así, reconoce que a él no le queda otro remedio que dedicarle a la compañía todo su tiempo. 'No doy ejemplo. Ahora estoy en la fase de liberarme durante al menos medio fin de semana, y este año me he obligado a tener vacaciones', señala. Sabe que todos los mensajes que intenta transmitir deben ir acompañados del ejemplo, 'porque el resto del equipo tiende a seguir tus mismos gestos y tus palabras'. En su opinión, en una organización pequeña -en BuyVip trabajan 40 personas- 'la gente mimetiza lo que haces'. En 18 meses de vida, la empresa ha experimentado un crecimiento de negocio y de personal, que ha originado ya una mudanza. Y no será la última porque la oficina, que ocupan ahora en el distrito madrileño de Chamartín, ya se les ha quedado pequeña. 'Mi plan era quedarnos al menos dos años, pero hemos crecido tanto que tenemos que buscar otro lugar'.
En la oficina de BuyVip no hay espacio para nada más: el material, que anuncian en su página web y que puede ser adquirido por los clientes, se fotografía dentro de la compañía, por lo que en los pasillos hay cajas con bolsos, ropa y complementos almacenados. El éxito de la empresa se debe, según su responsable, a que todavía el comercio electrónico no está suficientemente desarrollado. 'En España hay pocas opciones, y se reducen a los viajes, las entradas de los espectáculos y la compra del supermercado. Creo que hemos conectado muy bien con el público más teki se conoce así al colectivo aficionado a las nuevas tecnologías'.
BuyVip es una organización creada a través del foro de business angels del IESE, donde cursó un Programa de Dirección General (PDG). Se trata de un encuentro entre inversores individuales, habitualmente empresarios o directivos de empresas, que aportan su capital, así como sus conocimientos técnicos y su red de contactos personales a los emprendedores.
Gustavo García Brusilovsky consiguió un importante respaldo financiero de empresas destacadas del capital riesgo, como 3i, Grupo Intercom o Molins Capital Inversión. 'Gracias a la ayuda del IESE, que nos dejó una sala a los cuatro socios de la compañía para hacer una presentación, conseguimos todo este respaldo'. Iniciaron la aventura con 500.000 euros y más de 30 accionistas, todos ellos compañeros de la escuela de negocios. Previamente, este emprendedor fue director general del portal de compras para empresas, Portum, donde manejó entre sus clientes a Repsol YPF, Siemens o Caja Madrid. Con anterioridad, trabajó para IBM, como responsable de los servicios de marketing de la unidad de ordenadores personales, y como director de marketing de negocios electrónicos.
Es licenciado en Bioquímica y diplomado en Informática por la Universidad Pontificia de Salamanca. Además, ha realizado un Máster en Administración y Dirección de Empresas en la Universidad de Houston, tras el que se especializó en el área de marketing. Inició su carrera profesional trabajando en Procter & Gamble y en McDonald's España. Pero lo suyo no eran las grandes multinacionales. Prefería ser emprendedor.
Como compañía, el retrato de su esposa
El único objeto personal que le acompaña en su despacho es un retrato de su mujer, 'la tengo presente por las muchas horas que me paso en el trabajo'. Donde no pasa mucho tiempo es frente a su mesa. Prefiere trabajar en la sala de reuniones, donde dispone de su herramienta más preciada, el ordenador. Es más, Gustavo García Brusilovsky comparte su despacho con el director financiero y con el responsable de marketing. 'No es bueno que un directivo trabaje solo. Me gusta estar rodeado de gente. Cuando necesito privacidad para tratar cualquier tema, la encuentro en la sala de reuniones'.A los elementos ornamentales no le presta mucha atención. En cambio, no soporta tener la mesa repleta de papeles. 'Necesito limpiarla todos los días. No me gusta que la gente acumule cosas, sólo quiero que se tenga lo imprescindible para tener un impacto en la consecución de resultados'. Y si alguien del equipo acumula documentación, no duda en tratar el tema, 'porque eso demuestra que algo no funciona'.