'No buscamos cotizar en un momento de euforia'
Fundó Renta 4 en 1985 y la preside desde hace 17 años. La firma prevé convertirse en la primera empresa española de servicios de inversión en salir a Bolsa.
Renta 4 afronta por segunda vez el 'sueño', según su presidente, de salir a Bolsa. La primera vez, en 2000, el pinchazo de la burbuja tecnológica truncó los planes del grupo de servicios de inversión. Ahora, con el folleto pendiente de verificación por parte de la CNMV, Juan Carlos Ureta (Bilbao, 1956) manifiesta la 'vocación histórica' de la firma por cotizar en Bolsa y quita hierro al impacto de la actual crisis de confianza.
Finalmente, después de siete años, salen a Bolsa.
La idea de cotizar en Bolsa, o más bien la vocación, la hemos tenido siempre. El sábado pasado aprobamos en junta la decisión. Hemos iniciado los trámites y ahora estamos sometidos a la verificación del folleto. Y sí, finalmente salimos a Bolsa, pero bueno, estas cosas siempre hay que tenerlas un poco en la cabeza, y cuando uno puede -porque la situación de la compañía es de madurez suficiente y piensas que puedes abordarlo- lo intentas. A veces lo consigues y a veces no, pero tampoco hay que darle mayor dramatismo.
¿Qué ha cambiado con respecto a 2000, cuando suspendieron la operación?
En aquel momento, lo que atrajo mucho la atención fue que Renta 4 había sido una de las primeras entidades en España en hacer algo muy novedoso entonces, que era el broker online, y quizá nuestra historia ante el mundo inversor estaba muy centrada, creo que de forma muy parcial, en el negocio de internet. Se ha visto que es un modelo muy bueno de negocio y lo seguimos fomentando. Pero nuestro modelo de negocio no ha sido exclusivamente el broker online. En aquel momento, al caer en desgracia todo el modelo en el mercado vimos que no tenía mucho sentido realizar una OPV tan centrada en ese segmento; unido además a toda la crisis de la Bolsa.
¿No le asusta la crisis de confianza actual de cara a dar el salto al parqué?
No buscamos un momento de euforia para salir a Bolsa. Al revés, preferimos francamente que haya una evaluación más serena por parte del inversor, porque en momentos de euforia las cosas se distorsionan. Tan malo es que se distorsionen a la baja como al alza. Si hay que caer en uno de los dos escenarios, casi preferimos el primero, porque queremos tener recorrido en Bolsa.
El objetivo de la salida a Bolsa es obtener fondos propios para seguir creciendo. ¿Hacia dónde?
Hay un objetivo último muy claro. Desde sus inicios Renta 4 ha tenido vocación de llegar a ser una entidad de referencia para el inversor y el ahorrador español. Queremos llegar a ser la entidad que el inversor español tenga en la cabeza cuando piense en inversión. En eso la salida al parqué también nos ayuda, porque estar en Bolsa ofrece la visibilidad de marca y la solidez al demostrar que se ha sido capaz de superar todos los obstáculos para llegar a cotizar en Bolsa. En ese sentido, estamos excedentarios de fondos propios. No tenemos necesidad, pero siempre es bueno fortalecer los recursos propios, más aún en la actividad financiera.
¿Qué puede adelantar de la operación antes de que se apruebe el folleto?
Prioritariamente, en su amplia mayoría, es una ampliación de capital, aunque habrá un pequeño tramo casi simbólico de OPV. A la espera de que la CNMV verifique el folleto, tendrá un tramo institucional mayoritario.
¿Trastoca mucho el accionariado de Renta 4 la salida a Bolsa?
No. El equipo directivo, incluido yo, seguiremos manteniendo una posición en la compañía mayoritaria.
¿Cree que salir a Bolsa puede poner en riesgo la independencia de que hace gala Renta 4?
Todo lo contrario. La Bolsa garantiza la independencia, porque te permite tener una apertura de capital, no a un solo socio, sino al mercado y a inversores que son transitorios. Si entrase un solo socio en esta ampliación de capital, los condicionantes de la independencia serían mayores. La idea es que entre un conjunto de socios muy diversificado. La independencia no es que uno haga lo que le dé la gana, sino no estar encuadrado en compañías de otro tipo que enmarquen una política de gestión en función del propietario y no de la propia empresa. Aquí lo entendemos como independencia de gestión, pero no somos totalmente independientes. Somos dependientes de nuestros clientes, de nuestras cifras de negocio y seremos dependientes de someternos al mercado y que éste entienda la validez de nuestro modelo de negocio. ¿Quiere eso decir que nunca en la vida habrá un cambio accionarial relevante? Bueno, la vida es muy larga y nunca se pueden poner puertas al campo.
'La crisis del verano ha sido positiva'
'En esta casa tenemos mucho respeto a los mercados y no vamos a decir que no nos importa lo que está pasando', sostiene Ureta. Sin embargo, el presidente de Renta 4 resta importancia a la crisis de confianza del último verano. 'No queremos pecar de un optimismo ingenuo, pero en realidad no vemos la tragedia que dicen algunos. El foco de la crisis ha estado en unos mercados, los de crédito y los de bonos corporativos, en los que había unos excesos evidentes. No me sorprende la crisis. Lo que me sorprende es que la gente se sorprenda, porque era algo que se veía venir. Lo bueno es que esos excesos se hayan corregido'.Este experto considera que el impacto sobre la Bolsa ha sido limitado y se ha concentrado en el sector bancario. 'Los datos de las Bolsas son los que son: el pasado lunes el Dow Jones marcó máximo histórico, el Ibex cotiza sobre los 14.700 puntos y varias Bolsas asiáticas están en máximos. 'Creo que los datos no permiten hablar de una crisis generalizada de la Bolsa. Además, creemos que la crisis de este verano es muy positiva para el futuro de la economía y de las Bolsas'.