La cúpula de ABN da por ganadora a la puja de Santander y sus socios
Los principales directivos de ABN Amro dieron ayer por ganadora a la propuesta de compra lanzada por Santander, Royal Bank of Scotland y Fortis. Su consejero delegado, Rijkman Groenink, valoró la oferta del Barclays como 'demasiado baja'.
Los principales ejecutivos de ABN Amro analizaron ayer en profundidad las dos propuestas de adquisición sobre el banco holandés. La entidad celebró una junta extraordinaria para evaluar las ofertas y, aunque sobre el papel los directivos mantienen la neutralidad, reconocieron que la puja de Santander y sus socios es claramente superior.
El presidente ejecutivo de ABN, Rijkman Groenink, explicó a los accionistas que la propuesta de Barclays -de 61.000 millones de euros, principalmente en acciones-, es 'demasiado baja'.
La diferencia entre lo que está dispuestos a pagar Santander y sus socios del consorcio -71.000 millones de euros, el 93% en acciones- y lo que ha ofrecido Barclays es 'tan grande que no podemos pediros que paguéis la diferencia de vuestro bolsillo', explicó Groenink a los accionistas en su intervención.
El director financiero, Huibert Boumeester, respaldó las palabras del consejero delegado y llegó a asegurar que existen 'muchas posibilidades' de que el consorcio gane la puja.
La turbulencias bursátiles de los últimos meses, que han golpeado especialmente al sector bancario, han hecho que la propuesta de Barclays se haya devaluado un 14%.
Si la cúpula de ABN mantiene la neutralidad formal entre ambas propuestas es, exclusivamente, a causa de la intención del consorcio de trocear ABN.
En lo referente a la financiación de la oferta del trío de bancos, un aspecto que algunos analistas habían cuestionado, Groenink aseguró que, de acuerdo con sus asesores, 'el consorcio no tendrá ningún problema para lograr' los recursos necesarios.
Santander ya se ha puesto manos a la obra y, además de obtener liquidez con titulizaciones y venta de activos, ha puesto en marcha una emisión de 7.000 millones de euros en bonos convertibles.
De Chicago a California pasando por Nueva York
Por paradójico que resulte, el destino de la mayor adquisición transfronteriza de la historia de Europa se ha decidido más en Estados Unidos que en el Viejo Continente. A pesar de que ABN Amro tiene su sede en Holanda; a pesar de que los dos candidatos a adquirirla tiene su base en Europa (tanto los tres miembros del consorcio, como Barclays); a pesar de la importancia del veredicto de Bruselas en materia de competencia, los acontecimientos que han marcado la gran batalla del sector bancario europeo han tenido lugar en Estados Unidos.Ayer, los directivos de ABN Amro explicaron que la venta de Lasalle -la filial en EE UU, especialmente en Chicago- a Bank of America se ejecutará en octubre. En su día, esta operación fue considerada la jugada maestra de Barclays y el peso que decantaría la balanza del lado de la entidad británica. Tras varios recursos judiciales interpuestos por el consorcio, Bank of America logró hacerse con Lasalle. Del mismo modo que la venta de la filial de Chicago benefició a Barclays, la quiebra de varias hipotecarias subprime en California, su contagio a los bancos de inversión de Wall Street y la subsiguiente crisis crediticia ha deteriorado la propuesta de Barclays e inclinado el fiel hacia el consorcio.