El gobernador del Banco de Inglaterra defiende su actuación ante la crisis del Northern Rock
El gobernador del Banco de Inglaterra (BoE), Mervyn King, exculpó hoy al organismo que dirige del caos provocado por la operación de rescate de la quinta entidad financiera del país, Northern Rock, que ha hundido al banco en bolsa debido a la retirada en masa de sus fondos por parte de sus clientes, según declaraciones publicadas hoy en la prensa británica.
King atacó los elevados niveles de transparencia de la regulación británica, que obligaron, según su opinión, a que la institución procediera a hacer pública la operación de rescate, lo que motivó un pánico social que desembocó en la retirada de 2.000 millones de libras en cuatro días.
El gobernador del BoE realizó estas declaraciones en respuesta a las acusaciones de un comité del Tesoro, que le reprochó la actuación de la institución al respecto de la crisis del banco y su manejo de la situación tras el préstamo de emergencia que desembocó en el pánico social.
King señaló que hubiera preferido que el BoE hubiera actuado de manera encubierta como un prestamista de último recurso, pero que la directiva sobre abusos de mercado impide esta posibilidad. Por otro lado, el gobernador admitió que esperaba encontrar un ''caballero blanco'' para rescatar a Northern Rock, pero que no fue posible completar una OPA que evitara la crisis del banco ya que los trámites duran "al menos 60 días".
Además, no se hubiera podido liquidar el banco porque esta operación habría congelado los depósitos del banco, y en consecuencia, los ahorros de sus clientes. El banco británico cayó en bolsa tras verse obligado a recurrir a un préstamo de urgencia del Banco de Inglaterra para hacer frente a sus problemas de liquidez. La crisis se agravó cuando miles de ahorradores decidieron retirar sus depósitos de la entidad a pesar de los mensajes de tranquilidad enviados por el Banco de Inglaterra.