Trichet aplaza la subida de tipos por la incertidumbre económica
El BCE mantiene el precio del dinero en el 4% por la incertidumbre en la economía
El Banco Central Europeo tomó ayer la decisión de no tocar los tipos de interés y mantenerlos en el 4%. Se despejaba así una de las medidas del banco europeo que más expectación ha generado en los últimos años y sobre la que pesaba una mayor incertidumbre. Al final, los expertos acertaron en su apuesta de que no se tocaría el precio del dinero. Tras la reunión del Consejo de Gobierno, el presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, señaló en rueda de prensa que en vista del posible impacto general del incremento de la volatilidad en los mercados financieros y la reaparición de los riesgos por la crisis hipotecaria en EE UU, 'era necesario un seguimiento apropiado de la evolución económica'. Una decisión similar a la adoptada ayer por el Banco de Inglaterra, que mantuvo los tipos en el 5,75%, su nivel más elevado de los últimos seis años, una vez que las cinco subidas de tipos en un año han frenado las presiones inflacionistas.
En la decisión más difícil de Trichet desde diciembre de 2005 (se han producido ocho subidas desde entonces), el presidente del banco señaló que era el momento de recabar información adicional 'y examinar los nuevos datos antes de sacar conclusiones', aunque no dejó pasar la ocasión para recalcar que la política monetaria del BCE seguía siendo 'acomodaticia' y que mantendría 'una vigilancia cercana' en lugar del clásico 'fuerte vigilancia' que suele pronunciar en sus comparecencias y que antecede a una subida dos meses más tarde.
Xavier Segura, director del servicio de estudios de Caixa Cataluña, señala que el mantenimiento del precio del dinero era la opción más lógica, 'en un momento en el que se han juntado la intranquilidad de los mercados, las inyecciones de liquidez y la previsible bajada de tipos que va a hacer la Reserva Federal'. No obstante, Segura descuenta una subida en octubre o noviembre de 0,25% ante la posición del BCE, 'que quiere controlar las distorsiones de los precios, el fuerte crecimiento de la masa monetaria y quiere reafirmar su credibilidad para sentirse ajeno a presiones externas', en clara alusión a la presión ejercida por Nicolas Sarkozy, presidente de Francia, para que la subida del precio del dinero no merme el crecimiento de la UE.
En la decisión tomada por Trichet ha tenido mucho que ver las nuevas proyecciones macroeconómicas realizadas por el BCE, que prevén un menor crecimiento y una mayor inflación para la zona euro en los dos próximos años. La institución prevé que el PIB de la zona euro en 2007 se situará entre el 2,2% y el 2,8%, por debajo de la última estimación, que le daba un crecimiento entre el 2,3% y el 2,9%. La revisión a la baja se ha producido 'por unos precios del petróleo más altos y unas condiciones de financiación más tensas'.
El Fondo Monetario Internacional (FMI), por su parte, revisará a la baja su expectativa de crecimiento mundial para el año próximo debido a las turbulencias recientes de los mercados financieros, anunció ayer una fuente de la institución. El portavoz del FMI, Masud Ahmed, indicó a los periodistas que el mayor impacto en los ajustes de las previsiones que la institución hace del crecimiento económico se verán en Estados Unidos, aunque también habrá un menor ritmo de crecimiento en Europa. En julio pasado, el informe del FMI subió en tres décimas su cálculo del crecimiento económico mundial en 2007, para un incremento del 5,2%. El FMI calculó que la economía de EE UU crecería un 2% en 2007 y un 2,8% en 2008.
El Banco Central Europeo también revisó al alza las estimaciones para la inflación, que se situará en 2007 el 1,9% y el 2,1%, frente a la horquilla del 1,8-2,2% previsto en junio. No obstante, el BCE mantiene la previsión de crecimiento para 2008 y tan sólo prevé una subida de precios de una décima respecto a la última previsión. En el alza de los precios puede presionar, según Trichet, la subida de los impuestos indirectos, un encarecimiento del petróleo y de los productos agrícolas, lo que haría 'que los riesgos para la estabilidad de precios apunten al alza'.
Gregorio Izquierdo, director del Servicio de Estudios del Instituto de Estudios Económicos, asegura que el actual escenario apunta a que tan sólo se produzca un sola subida de 0,25 puntos hasta finales de año, 'ya que parece que la gran mayoría de alzas ya se han producido y otra subida podría comprometer la recuperación en Europa'.
El BCE rebajó el avance estimado del PIB para este año y elevó las previsiones de la inflación para 2007 y 2008
El BCE inyectó ayer en el mercado 42.245 millones de euros (57.453 millones de dólares) a un tipo de interés mínimo del 4,06% y con un vencimiento de un día. En un anuncio a los mercados sobre aspectos operativos, la entidad monetaria europea dijo el miércoles que 'la volatilidad en el mercado de dinero del euro había aumentado y que el BCE observaba muy de cerca la situación'. A pesar de ello, el banco central se mostró dispuesto a contribuir al logro de unas condiciones ordenadas en el mercado de dinero del euro.
En la misma línea, el Banco de Inglaterra anunció ayer que inyectará 4.400 millones de libras (unos 6.500 millones de euros) en los mercados monetarios la próxima semana, 'si los tipos de interés diarios en el mercado interbancario permanecen altos'. Por su parte, la Reserva Federal realizó ayer tres nuevas inyecciones de liquidez por valor de 31.250 millones de dólares (22.846 millones de euros).
No obstante, el economista jefe del Banco Mundial, François Bourguignon, quiso tranquilizar a los mercados al asegurar que la crisis hipotecaria 'tendrá un impacto limitado y estará solucionada en un par de meses'.
Tras el anuncio de Trichet, el tipo interbancario (el que utilizan los bancos) bajó desde el 4,58% que registró el miércoles hasta el 4,050% de ayer. El euribor a doce meses, el que utilizan la mayoría de los hogares, también bajó y se situó en el 4,781%, tras marcar el miércoles un 4,807%, el nivel más alto desde diciembre de 2000.
El FMI se suma a la OCDE y revisará a la baja el crecimiento económico de 2008, sobre todo en EE UU