Un gigante europeo de la energía
Con la Copa del Mundo de Rugby a punto de comenzar este fin de semana en París, el presidente francés Nicolas Sarkozy ha continuado con sus actos como político regateador, empezando otro extravagante ataque con la pelota emergiendo de otra melé. Su último movimiento ha convertido un impasse de 18 meses sobre la fusión de Suez y la compañía (en gran parte) pública Gaz de France (GDF) en otra típica solución francesa. Las dos empresas se han fusionado ahora como iguales (...).
Casi en la misma forma en la que apareció para resolver la lucha franco-alemama de poder en Airbus inmediatamente después de su elección, así Sarkozy ha mostrado su habilidad para deshacer otro nudo industrial.
El Estado francés pasa de controlar el 80% de una compañía media a poseer el 35% de un nuevo gigante de la energía. GDF-Suez (...) será la empresa líder de gas en Europa y la líder global en gas natural licuado (...). Sarkozy parece concentrado en perseguir una política tradicionalmente gaullista de intervención en las empresas cuando él piense que encajan para los intereses nacionales franceses, en áreas como la energía, aeroespacial y defensa. Los inversores y otros Gobiernos europeos deberían reforzar unas más potentes melés.