Oportuna Telefónica
La tormenta crediticia, que ha disparado el coste del endeudamiento, tiene entre sus víctimas potenciales a las empresas con alto pasivo. Y en esta categoría destacan las operadoras de telecomunicaciones, con el grupo Telefónica a la cabeza. La compra de O2 hace casi dos años disparó el pasivo de la compañía española por encima de los 50.000 millones de euros y la convirtió en la operadora más endeudada de Europa. Es decir, una crisis como la actual debía hacer temblar a su departamento financiero. Sin embargo, no es así. La razón es que -probablemente sin saber lo que se avecinaba- la empresa se ha adelantado a los acontecimientos siendo muy activa en los mercados de deuda y, antes de que todo estallara, rebajó el coste de su endeudamiento. Aunque Telefónica no está inmunizada, porque gran parte de su refinanciación se basa en emisiones a tipos variables, sí se puede decir que en este campo ha hecho los deberes.