Las Bolsas juzgarán esta semana la bajada de tipos de la Reserva Federal
La Reserva Federal logró calmar los ánimos del mercado el viernes con su decisión de reducir el tipo al que cobra dinero a los bancos, la llamada tasa de descuento. Las Bolsas agradecieron el guiño pero está por ver la segunda lectura que hacen al comunicado que acompañó la actuación de la autoridad monetaria.
Y es que la Reserva Federal tuvo que admitir que 'los riesgos para el crecimiento han aumentado de manera considerable' ante el empeoramiento de las condiciones de crédito y la incertidumbre actual. Por ello, mostró su disposición a volver a intervenir en caso de necesidad para restablecer el orden en los mercados financieros.
La medida surtió efecto y el viernes los mercados rebotaron con fuerza después de sufrir la víspera uno de los desplomes más sonados en años, un auténtico jueves negro. La Reserva Federal bajó el tipo de descuento -la tasa que cobra a los bancos que le solicitan fondos cuando sus peticiones en el mercado interbancario o en las subastas periódicas les resultan insuficientes- del 6,25% al 5,75%, una medida que tenía como objetivo acercar este tipo al 5,25% oficial. Al mismo tiempo, amplió el plazo de estos préstamos a más de 30 días y anunció su disposición a aceptar como garantía hipotecas y otros activos relacionados. En definitiva actuó como un bálsamo al eliminar tensión en el área que más incertidumbre genera en el momento actual.
El problema es que después de la semana de alta volatilidad que concluyó el viernes, los analistas esperan nuevas dosis de infarto. Se prevé que cualquier noticia negativa relacionada con la crisis hipotecaria sea mal recibida y la escasez de indicadores económicos de relevancia en los próximos días tampoco ayudará a dar muchas pistas. Se espera, por tanto, que la incertidumbre persista hasta que se pueda cuantificar con datos el impacto real de la crisis tanto en la economía como en el sistema financiero.
Los datos económicos recientes, sin embargo, a excepción de las cifras publicadas en relación con la construcción de viviendas, han estado en línea con lo esperado.
'Preocupa el aumento de la capacidad instalada ya que puede erosionar los márgenes empresariales y elevar las presiones inflacionistas, así como el repunte del ratio de inventarios sobre ventas ya que podría estar indicando una acumulación de stocks', comentan desde Ibersecurities, aunque de momento las empresas ganan mucho dinero y sus valoraciones están atractivas. Los expertos comentan, en cualquier caso, que EE UU podría soportar recortes de tipos de interés. El mercado de futuros, de hecho, da casi por seguro un recorte de emergencia. El BCE, por tanto, también se verá presionado ya que de darse un recorte de la Fed bien ahora, bien en su reunión de septiembre, su margen para subir tipos mermará a no ser que se quiera enfrentar a una divisa fuerte.