Renovables sí, pero
El autor reniega de los supuestos favores de 'amigos' de las energías renovables, como el de pedir que las primas a las renovables sean financiadas con cargo a los Presupuestos Generales del Estado, ya que el sector encontraría dificultades con las entidades crediticias
Con los favores que algunos llamados amigos, los que se declaran 'partidarios de las energías renovables, pero ' pretenden hacer al sector, los enemigos de éste pueden descansar y estar tranquilos. El último favor de los partidarios del sí, pero ha sido pedir que las primas a las renovables sean financiadas con cargo a los Presupuestos Generales del Estado. Tratan así de servir a lo que para ellos son causas mayores, entre ellas reducir el déficit de tarifa. Por cierto, la forma en que éste se paga es tremendamente injusta, nada solidaria y antisocial, ya que al demorar el pago del coste actual de la luz -en el recibo pagamos el 20% menos de lo que cuesta generar lo que consumimos- se le imputan a los abonados futuros los consumos que se están haciendo hoy.
Llevar las primas de las energías renovables a los Presupuestos Generales del Estado sería, de hecho, darle el tiro de gracia al sector. No habría ni un solo banco que financiara un solo proyecto, si las retribuciones tuvieran que ser decididas cada año en el Parlamento. Y no se trata de que se cobrara más o menos, sino de no saber lo que se cobraría. Por tanto, sería casi imposible conseguir financiación en el hipotético caso de que alguien fuera a pedirla si esta propuesta se materializara.
El desarrollo de las renovables exige estabilidad en sus regulaciones. El simple anuncio de cambios en el sistema hace tambalearse al sector. Que les pregunten a los bancos y cajas, con importantes recursos en la financiación de proyectos, y a los productores, con inversiones millonarias que recuperarán, aun si las cosas no empeoran, a muy largo plazo.
Parece que para los partidarios de las renovables, pero éstas son las causantes directas del déficit de tarifa y casi las únicas. Para alimentar este debate se han llegado a decir tremendas barbaridades, como que el sobrecoste del régimen especial de producción eléctrica -el importe de las primas, es un coste del sistema y, en ningún caso, un sobrecoste- es igual a la totalidad del déficit tarifario. Como si el constante aumento del precio del gas y del petróleo no tuviera que ver con el coste de generación y como si el exceso de prudencia en un mal entendimiento de lo que es la defensa del interés general, aconseje no subir la tarifa eléctrica, que es lo único que realmente crea el déficit de tarifa.
Puestos a decir barbaridades, ¿por qué no soportan también los Presupuestos el déficit de tarifa, el coste para el sistema de la propia CNE o el coste del transporte de la energía de Red Eléctrica de España? O mejor, y con ello se acabarían los problemas para los partidarios del sí, pero , ¿por qué no soportan los Presupuestos del Estado el suministro eléctrico y así tenemos todos luz gratis?
Los partidarios del sí, pero deben saber que, entre otras muchas razones que justifican su existencia, las primas a las renovables compensan parcialmente las externalidades de las energías convencionales, que no internalizan todos sus costes. Por lo tanto, es más justo que sean los consumidores de electricidad y no otros -el que más consume, más paga- los que compensen los costes que las otras energías trasladan a los Presupuestos Generales del Estado. Porque los costes que las convencionales externalizan los terminamos pagando de todos modos con los impuestos. También deberían tener claro que el sistema de primas español es el que se ha comprobado más eficaz en el desarrollo del sector de las energías renovables.
A pesar de los partidarios de las energías renovables sí, pero la incorporación de las renovables a nuestra vida es irreversible. Son las renovables las que solucionarán en un próximo futuro el problema de la seguridad de abastecimiento y el cambio climático. Si el resto de las energías incorporaran sus costes externos a sus precios, no existiría el debate de si las renovables son caras o no, ya que competiríamos con ellas perfectamente a precios de mercado. No tendríamos, por tanto, que salir a defendernos periódicamente de los que se llaman nuestros amigos.
La Asociación de Productores de Energías Renovables lleva desde su creación, hace ahora 20 años, colaborando con la Administración en el desarrollo del sector de las energías renovables. En este tiempo ha habido, y los habrá en el futuro, momentos de encuentros y desencuentros, pero nuestra Asociación siempre ha actuado con lealtad en la defensa de sus legítimos intereses.
José María González Vélez. Presidente de la Asociación de Productores de Energías Renovables (APPA)