Gestos hacia el mundo

El Gobierno argentino está haciendo gestos hacia el mundo en sintonía con la nueva política que, si Cristina Kirchner llega a la Casa Rosada, se pondría en marcha desde diciembre. Hubo un ensayo en Buenos Aires: el volcánico Hugo Chávez, la vicepresidenta española y los miembros del influyente Council of the Americas han pasado por estas playas. Esto continuará en septiembre en Nueva York, con la concurrencia de Néstor Kirchner a la Asamblea de la ONU (...).

Hay un giro que intenta hacer más operativa la relación con Estados Unidos (...). Más allá de la retórica ideológica, los hechos demuestran que los vínculos son más intensos de lo que la apariencia muestra. Con Chávez la cuestión es de grado. La necesidad argentina de mantener una buena relación se explica porque Venezuela le ha dado a Kirchner una mano cuando otros se la negaron, especialmente en materia financiera (...).

En el caso español, la vicepresidenta es una dirigente de peso. España ha sido, con sus idas y vueltas, un aliado permanente de Kirchner, a pesar de sus desplantes. Y es una relación que Cristina quisiera mejorar mucho más, así como quiere reactivar vínculos con París y Berlín. El objetivo es buscar un arreglo para comenzar a saldar la deuda con el Club de París.