Fenosa y la venta de Continental casi triplican el beneficio de ACS

La consolidación de Unión Fenosa en las cuentas de ACS ha vuelto a catapultar el beneficio del grupo, esta vez unido a la venta de Continental Auto. La primera constructora del país casi triplicó su resultado, hasta 1.010 millones. La eléctrica aportó un 27% de las ventas, pero disparó la deuda.

La incorporación de las ventas y el Ebitda de la tercera eléctrica española a las cuentas y al balance de ACS ha tenido en el semestre un efecto aún más significativo que en el primer trimestre. La constructora consolida Fenosa desde enero, algo que se permite porque controla más de la mitad del consejo, además de tener un 40,5%. El beneficio neto creció un 169%, hasta 1.010 millones.

La reciente venta de la filial de transporte por carretera, Continental Auto, agregó, además, unas plusvalías de 424 millones después de impuestos. Y a esto se unieron la venta de las concesiones de autopistas Dundalk en Irlanda y la A1 en Reino Unido, además de la plusvalía correspondiente a la venta de la consultora Soluziona por parte de Fenosa.

Sin todos estos extraordinarios, el beneficio ordinario neto de impuestos habría crecido un 31%, hasta 482,3 millones, según los datos del grupo (ver gráfico).

La energía, con la llegada de Fenosa a las cuentas, se ha consolidado como la segunda fuente de ingresos, el 27% de los 10.409 millones. Aunque la construcción aún sigue siendo el primer motor, con una aportación del 34% (3.566 millones). Muy diferente es el peso de la energía en el beneficio bruto de explotación, ya que es responsable del 56% frente al 18% de la construcción. Esta división sigue fuerte (creció un 12% en ventas) por la obra civil y la edificación no residencial.

La cara negativa de la incorporación de Fenosa es que carga aún más de deuda a ACS. Suma 9.666 millones y eleva a 15.836 el endeudamiento total del grupo, lo que supone casi duplicarlo (aumenta un 174%). Con esta cifra, se acerca al nivel de Sacyr, que ronda los 18.000 millones y es la segunda constructora más endeudada. En torno a la mitad, 7.122 millones se respalda con cargo al grupo.

Dividendos de Iberdrola

En cuanto a la otra eléctrica en cartera de ACS, Iberdrola, en la que ha tomado posiciones (tiene el 11%) de cara a una futura reorganización de sector, aportó 55,3 millones vía dividendos. El grupo de infraestructuras Abertis, en el que controla un 24,8%, sumó 64,4 millones a la cuenta. Mientras, el 25% de Hochtief, primera constructora europea en ventas, que el grupo compró el pasado trimestre, se estrena sumando a la cuenta 6,8 millones de euros.

Del total de inversiones, 2.019 millones, de los que 1.264 millones correspondieron a la adquisición en Alemania. Otros 561 millones fueron a parar a inversiones en concesiones (58 millones al hospital de Majadahonda en Madrid) y a energías renovables, como los 89 millones para una planta termosolar en Granada, además de otros 124 millones para diversos parques eólicos.

Inversiones para reforzar las oficinas en EE UU

La marea de proyectos de infraestructuras que se avecina en EE UU ha hecho que las constructoras se vuelquen en explorar este mercado. ACS ha invertido parte de los 77 millones que destinó a su división de construcción en mejorar las oficinas de su filial Dragados en este país, que acaba de descubrir las ventajas de las concesiones administrativas que en Europa llevan décadas funcionando. El grupo tiene delegaciones en Nueva York, Miami y Texas. Decidió instalarse allí tras conseguir un gran contrato del metro de Nueva por casi 400 millones de euros, además de otro más para la modernización de presas también en esta ciudad. Al margen, ACS cayó ayer en Bolsa un 2,14%