Los niños españoles no tienen guarderías
Se necesitan 300.000 plazas para escolarizar a los menores de 3 años
El cuidado de los más pequeños no está en la agenda de los políticos españoles. Y eso que nuestro país tiene un mandato de la Unión Europea (Cumbre de Barcelona, 2002): ofrecer en el año 2010 una plaza escolar a 33 de cada 100 niños menores de tres años. 'La carencia de plazas preescolares no es un asunto menor. Repercute en la incorporación de la mujer al trabajo y en la cohesión social'. Lo dijo ayer Marcos Peña, presidente del Consejo Económico y Social (CES) durante la presentación de Cauces, la nueva revista de la institución que preside y que congrega en un foro de diálogo a representantes sindicales y patronales.
'En España no existe una política estatal pública específica sobre el cuidado de los niños y hay que seguir trabajando por aumentar el número de guarderías, ámbito en el que los avances han sido muy modestos', puede leerse en la publicación del CES. La realidad estadística corrobora el aserto: el 82,7% de los niños entre 0 y 3 años están sin escolarizar en España y son necesarias 300.000 plazas para cubrir esta demanda y cumplir el mandato de Barcelona. Entre 2000 y 2006 el número de menores de 3 años aumentó un 30,6% en nuestro país y aunque la inmigración ha contribuido a ello, los extranjeros todavía no llegan al 9% del total de esta edad.
El documento alerta sobre las importantes diferencias educativas que aún persisten entre unas regiones y otras, especialmente a partir de los dos años. A juicio de los expertos estas divergencias 'más que obedecer a opciones personales de vida, como la crianza en el seno familiar, reflejan la carencia de centros disponibles y asequibles en precio, así como las distintas oportunidades de empleo que tienen las madres en cada región'.
Son llamativas las diferencias entre el País Vasco (40,5%), Cataluña (29,9%), Aragón (25,9%) o Madrid (25,5%) y Canarias (0%), Extremadura (1,7%), Asturias (2,2%) y Castilla-La Mancha (2,5%). A los dos años, el porcentaje de niños escolarizados en País Vasco llega al 86,3%, en Cataluña al 52,7%, en Aragón al 49,2% y en Madrid al 43,1%. Por su parte, en Canarias sigue siendo del 0%, en Castilla-La Mancha es del 4,5%, en Extremadura del 3,3% y en Asturias del 4,7%.
A mayor formación de los padres, menor la edad a la que los hijos son escolarizados. Y a menos plazas públicas, mayor proliferación de la oferta privada. En Extremadura, Andalucía y La Rioja es donde hay más niños matriculados en centros privados, frente a Navarra, País Vasco y Galicia, donde la oferta pública es ampliamente aprovechada por los padres.
Las carencias en la primera infancia contrastan con los logros alcanzados en la edad escolar que va de los tres a los seis años, etapa en que la tasa de escolarización es del 95%, frente al 70% europeo.
Escolarización temprana contra fracaso escolar
Más de 18.000 familias han solicitado la ayuda de 2.500 euros por nacimiento o adopción de un hijo, lo que equivale casi al cien por cien de los niños nacidos desde el pasado 3 de julio, según anunció ayer el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, en el Congreso de los Diputados.Las ayudas económicas finalistas, como la aprobada recientemente por el Gobierno socialista, son frecuentes entre las comunidades autónomas, sin embargo, los expertos del CES recuerdan que este tipo de pagas no pueden suplir la necesaria creación de plazas de guardería. Entre otras cosas, porque los padres con más formación y recursos económicos son proclives a escolarizar a sus hijos a edad temprana, y eso crea brechas sociales.El informe advierte sobre la necesidad de reforzar la equidad en el acceso a este tipo de servicios, no sólo para facilitar la incorporación laboral de las madres, sino también la igualdad de oportunidades en la educación. 'La escolarización a partir del segundo año de vida refuerza en los niños la adquisición de destrezas sociales, emocionales, cognitivas y psicomotrices de gran utilidad para su trayectoria posterior', se lee en el informe. Además, destaca el documento, la educación preescolar temprana contribuye a evitar la transmisión intergeneracional de la pobreza y a prevenir el fracaso escolar.