El 'low cost' en los seguros de coche
Los seguros de coche para jóvenes han sido siempre un negocio muy poco apreciado para las compañías de seguros tradicionales. Al tener unas tasas de siniestralidad superiores al de otros grupos de población, pocas aseguradoras los contratan, y las que lo hacen muchas veces ofrecen a los tomadores precios desorbitados que les inducen a buscar alternativas más accesibles.
El origen de esta situación reside principalmente en los altos costes de gestión y distribución de las compañías de seguros. Si se añaden a la elevada tasa de siniestralidad de algunos colectivos, el resultado es una pérdida de clientes importante. Ante una situación así, la respuesta habitual de las compañías es no contratar seguros de coche para jóvenes, o bien ofrecerlos a precios disuasivos.
En muchos casos el único remedio que queda al joven es conducir el coche con el seguro a nombre de un familiar de mayor edad y con mayor antigüedad en el carné de conducir. Esto, aparte de ser un fraude, conlleva problemas en caso de siniestro, pues la aseguradora puede reclamar el coste del mismo.
La alternativa de ofrecer pólizas de seguro gestionadas desde internet es el enfoque de empresas como Internauto.com. El análisis descrito más arriba se fundamenta en la máxima 'reduzcamos los costes suficientemente hasta que el seguro de coche para jóvenes pueda ser viable'.
El uso de las últimas tecnologías de internet y el ahorro que supone, por ejemplo, aplicar estos análisis en call centers y en publicidad, permiten ofrecer precios razonables para los jóvenes.
Algunas empresas, para bajar los precios, han optado en los últimos años por realizar las pólizas de los seguros de coches mediante una línea telefónica, con la idea de que eso reduce las comisiones. En muchos casos, lo que se ha logrado ha sido crear grandes centros de contratación telefónica, con el coste añadido que además significa anunciarse mediante costosas campañas publicitarias en televisión, prensa y radio. Imaginémonos lo que cuesta todo esto. Y todo este desarrollo, podríamos preguntarnos, ¿al final quién lo paga? El cliente, naturalmente.
Lo paga en el precio de sus seguros de coche, tanto inicialmente como en las sucesivas anualidades de prórroga de la póliza, puesto que con esos gastos tan altos, en cuanto su siniestralidad experimenta el más mínimo incremento, para compensarlo sube el precio de su póliza. La conclusión es que abaratar los seguros de coche pasa por hacer una contratación y gestión basada en internet al 100%.
Por supuesto, es necesario que si, al contratar por internet, surge algún problema, haya un buen soporte, telefónico o por correo electrónico. Para ello resulta fundamental la inversión en tecnología, que permitirá conseguir costes más bajos.
Los países nórdicos lideran el ranking en cuanto a uso de internet. Es destacable que en España se ha pasado de 300.000 usuarios en 1996 a casi 20 millones en 2007. Además, los jóvenes utilizan internet para todo tipo de usos, correo electrónico, navegación y para búsqueda de productos y servicios.
En el negocio de seguros contratados online, en gran parte pólizas de coches, España está retrasada con respecto a otros mercados europeos punteros, por ejemplo el británico, pero la tendencia es común: primero se van sustituyendo canales de distribución de agencia por estructuras de tipo telefónico, y éstas a su vez lo son por operadores que trabajan cada vez más exclusivamente por internet.
En este sentido, la aparición de soluciones híbridas en el seguro de coche, tales como compañías de distribución agencial o telefónica pero con escaparates en internet, presenta numerosos problemas de competencia entre canales al operar a diferentes precios.
En España, prácticamente 25 millones de vehículos asegurados mueven un negocio superior a los 9.000 millones de euros de facturación en seguros de coches. En este momento sólo un 1,1% de las ventas de pólizas nuevas se realizan por internet, con un ahorro medio estimado del orden de 120 euros por póliza.
La conclusión a la que uno llega tras el análisis de datos como éstos es que sólo operadores que se desenvuelven 100% en internet aprovechan al máximo la utilización de avances tecnológicos nuevos que reducen los costes de una forma considerable. Con el consiguiente ahorro para el usuario final.
Lucio Román. Consejero delegado de Internauto