Cinco consorcios pujan con una rebaja máxima del 15% por la gran vía de peaje lusa

Cinco de los seis consorcios que han presentado oferta para el túnel de Marão, la primera gran autopista de peaje que saca a concurso Portugal tras años de parón, han pasado la primera criba. Las tres constructoras españolas interesadas seguirán en la puja, ACS, FCC y Sacyr Vallehermoso, y se enfrentarán a dos portuguesas, Mota-Engil y la concesionaria Brisa. La oferta más baja recibida por el Gobierno es un 15% inferior al presupuesto.

Es el dato oficial del Ministerio de Obras Públicas y Transporte, que sitúa la oferta más alta en 375 millones, cinco millones por encima del precio de licitación para la obra, mientras la más baja ha sido de 325,4 millones. No desglosa cada propuesta.

Eiffage se queda fuera

Otro dato que se desprende de la lista oficial es que la constructora francesa Eiffage, en la que Sacyr es primer accionista y ha lanzado una opa de momento en suspenso, no sigue en el proceso. Uno de los argumentos empleados por la gala, que acusa a la constructora de Luis del Rivero de concertación con otros accionistas españoles, es que Sacyr es rival directa. El túnel de Marão es el primer gran proyecto en el que coinciden.

Ahora, el Gobierno de José Sócrates seleccionará a dos consorcios y luego elegirá al ganador que construirá, financiará y explotará la primera autopista de peaje que pone en marcha. Está previsto que la adjudique este año.

Las españolas han buscado peso portugués en sus ofertas. ACS acude con la brasileña Odebrecht que controla la constructora lusa Bento Pedroso y cuenta con el BBVA como asesor financiero, mientras el Santander asesora a Brisa. Sacyr, por su parte, compite a través de su filial lusa Somague y está asesorada por Caixa Geral de Depósitos. Por último, FCC puja mediante Global Vía, concesionaria creada con Caja Madrid, aliada a la lusa Soares da Costa y asesorada por Banif (del Santander).