Mil señales de alerta para los compradores europeos
Bruselas retiró 926 productos peligrosos el año pasado
Parecen el regalo ideal para esta primavera. Una copa de helado, de una o dos bolas, para darse un baño, porque en realidad se trata de un burbujeante jabón. Y un presunto pastel de vainilla y chocolate que diluido en el agua libera sales tonificantes. Los dos productos, fabricados en China por la compañía Sweet Heart, han tenido, a pesar de su atractivo, un final amargo en el mercado europeo. Desde la semana pasada figuran en el sistema de alerta rápida de la Comisión Europea, una lista negra de productos retirados de la circulación por los riesgos que comportan para los consumidores.
En este caso, el importador retiró la mercancía porque las autoridades de Chipre consideraron que la fiel reproducción de helados y pasteles con productos tóxicos 'supone un serio riesgo de envenenamiento, porque es probable que los consumidores, en especial los niños, confundan el producto y acaben llevándoselo a la boca, chupándolo o tragándoselo'. Y el sistema de alerta comunitario supone el final de la carrera comercial de esos productos no sólo en Chipre sino en toda la Unión Europea.
Decenas de aparatos eléctricos, juguetes o cosméticos sufren cada año la misma humillación. En 2006, según los datos que presentará el próximo jueves la comisaria de Protección al Consumidor, Maglena Kuneva, la lista negra registró 926 artículos. La cifra supone un aumento del 32% en relación con el ejercicio anterior. Y en 2007 la tendencia al alza probablemente se mantenga, porque en los meses transcurridos las autoridades nacionales ya han notificado a Bruselas más de 300 productos potencialmente peligrosos. La Comisión verifica cada una de las notificaciones y, si el riesgo se confirma, emite la señal de alarma a los 27 países de la Unión Europea. Los niños figuran entre los consumidores más vulnerables a unos productos que no cumplen la normativa europea de salud y seguridad. El 30% de las notificaciones de 2006 correspondieron a juguetes o artículos infantiles. El material deportivo para cualquier edad y otros productos relacionados con el ocio copan otro 6% de la lista.
El entorno del hogar, además, parece el más susceptible de sufrir un accidente provocado por los artículos que llegan al mercado antes de la orden de retirada. Electrodomésticos, lámparas o productos de bricolaje figuran entre los productos que más a menudo causan baja forzosa en los estantes comerciales. Casi una quinta parte de estos objetos ni siquiera tienen una procedencia conocida. Y uno de cada dos lleva el membrete made in China o en algún otro país asiático.
Alemania y Hungría, los países más activos
Alemania y Hungría fueron en 2006 los países más activos en detectar y comunicar a Bruselas los productos potencialmente defectuosos. La CE, sin embargo, observa en todos los Estados una creciente utilización del sistema comunitario de alerta, reformado hace tres años para garantizar una vigilancia más homogénea del mercado (excluidos los productos alimentarios y farmacéuticos, que disponen de un sistema de vigilancia específico).España, según la memoria del Instituto Nacional del Consumo, remitió el año pasado 84 notificaciones a la CE. Durante ese ejercicio se localizaron y retiraron 348.145 unidades de productos peligrosos, incluidas las correspondientes a 22 artículos detectados primero en otro país de la UE.