Ferrys prepara el cierre tras fracasar su plan de viabilidad
La dirección de la empresa textil Ferrys está barajando la liquidación de la compañía tras haber fracasado el plan de relanzamiento aprobado hace apenas diez meses. La histórica firma valenciana no ha conseguido superar la crisis que arrastra desde hace más de diez años. Pese a que en junio del año pasado logró levantar la suspensión de pagos con una quita del 63% del pasivo, Ferrys ha cerrado el ejercicio con unas ventas menores de lo esperado en el plan de futuro, unos 24 millones, cuatro menos de los previstos, y ha incrementado las existencias en seis millones.
El gerente de la empresa, José Luis Pons, aseguró a Efe este fin de semana que la situación 'terriblemente difícil, y aunque barajamos la liquidación, esta será la última opción'. 'Hay una gran falta de liquidez', reconoció Pons. De hecho, Ferrys adeuda dos mensualidades a su 300 empleados. Fuentes sindicales han apuntado a que la compañía tampoco puede cumplir con el convenio de acreedores aprobado en el último proceso concursal, según el cual, en los próximos 10 años, Ferrys deberá pagar 5,98 millones de euros a la Seguridad Social, 5,05 millones a Hacienda, 4,3 millones al Instituto Valenciano de Finanzas, otros 4,3 a Bancaja, 3,1 millones al Fogasa y 0,44 a la CAM.