_
_
_
_
Posibilidad

Los gestores prevén aumentar su riesgo

La fuerte corrección que vivieron los mercados en marzo provocó reajustes en las carteras de los gestores de fondos. La encuesta mensual de Lipper muestra que el grado de exposición (% que sobrepondera menos el % que infrapondera) a la Bolsa cayó del 57,14% al 28,57%, coincidiendo con la caída del Ibex hasta el mínimo anual de 13.602,4 puntos. Los gestores, eso sí, no tienen intención de reducir su exposición a los activos más volátiles y en los próximos meses apuestan por aumentar sus posiciones de riesgo.

Una estrategia que concuerda con la sensación de optimismo moderado que domina en el mercado. 'La recuperación tan rápida es un síntoma de la fortaleza de mercado', comenta âscar Germade, de Cortal Consors. 'El fondo de mercado sigue siendo bueno aunque va a ser un año más volátil', añade David Ardura, de Gesconsult. 'En máximos cualquier noticia negativa puede generar una corrección y dar oportunidades de compra', dice Natalia Aguirre, de Renta 4.

Un escenario más complicado que parece encajar con la filosofía de inversión de los gestores encaminada a la búsqueda de oportunidades con algo más de seguridad. Así, mientras la menor exposición a la Bolsa en marzo ha favorecido a la renta fija, (ver cuadro), el 50% de los encuestados aún reconoce estar sobreponderado en liquidez. Un peso que el 28,57% de los gestores pretende reducir en los próximos 3 meses.

El 78,57% considera improbable que la renta fija supere a la Bolsa en 12 meses

En concreto, el 28,57% de los encuestados prevé aumentar el peso en acciones, mientras que el mismo porcentaje tiene pensado destinar mayores compras a la renta fija. El 78,57% de los encuestados, no obstante, considera improbable que la renta fija obtenga mejores retornos que la renta variable en los próximos 12 meses.

Una expectativa que explica que el 71,43% de los gestores no desee reducir su exposición a los activos más volátiles para aumentar su asignación a deuda e instrumentos monetarios. A la pregunta del mes tan sólo un 21,43% respondió que sí ha modificado su propensión de riesgo como consecuencia de las fuertes caídas consecuencia del desplome de la Bolsa de Shanghai y del alboroto suscitado a raíz de la crisis hipotecaria en EE UU.

En lo referente a las preferencias sectoriales Europa y Norteamérica son las dos áreas preferidas por los gestores. El 21,4% de los gestores pretende aumentar su exposición a la zona euro y el mismo porcentaje de encuestados planea dar más peso a Estados Unidos en los próximos tres meses. En concreto, el 64,29% piensa que la renta variable de la zona euro está sobrevendida.

La renta fija de estas dos áreas también es la preferida ya que el 28,57% pretende incrementar su exposición a los bonos de la zona euro, el mismo porcentaje que pretende incrementarlo para Norteamérica.

Desde una óptica global los inversores institucionales están sobreponderados en banca, telecos, seguros y farmacia. En los próximos tres meses planean incrementar aún más el peso de sus carteras en farmacia, seguros y bienes de consumo.

La distorsión de las opas

La encuesta mensual de Lipper hace hincapié en la aproximación más cauta de los gestores ateniendo las expectativas de un ejercicio de mayores altibajos.'El ejercicio va a ser complicado. No es descartable que el ritmo de crecimiento económico en la zona euro sea inferior de lo esperado y tampoco hay que olvidar que el riesgo de recesión en EE UU existe', comenta âscar Germade, de Cortal Consors. 'La subida ya no va a ser lineal', añade Jesús Muela, de GVC.Con el Ibex en zona de máximos los peligros aumentan, una situación que se ha convertido especialmente preocupante en la Bolsa española donde la expectativa de opas ha facilitado la escalada reciente, a la vez que obliga a pagar primas de control en muchas empresas que algunos expertos consideran injustificadas.La próxima clave técnica será la rotura de los 15.000 puntos. El mercado está a un paso y partir de ahí no se descarta que el mercado entre en subida libre. Eso sí, el potencial para final de año se reduce con cada ascenso. Pocos ven el mercado mucho más allá de los 15.300 puntos, por lo que no hay que olvidar que cualquier decepción económica o empresarial puede desatar la próxima corrección. Eso, sin mencionar los riesgos geopolíticos o una escalada del crudo.

Archivado En

_
_