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Columna
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50 años de la UE

Acaba de cumplirse el 50 Aniversario de la firma del Tratado de Roma. Con tal motivo quiero recordar a dos personas que hicieron posible en 1951 el Tratado de París, que dio origen a la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA), verdadero inicio de la Europa comunitaria. Me refiero a Robert Schuman y a Jean Monnet, sobre los cuales mi hija Maite, fallecida en septiembre del pasado año, dirigió una investigación realizada en la Fundación Jean Monnet para Europa. Gracias Maite, pues el libro En los orígenes de la Unión Europea. Robert Schuman y Jean Monnet (2a edición, 2003, Editorial Encuentro) me ha permitido conocer en profundidad el espíritu que animó la difícil aventura que culminó con el Tratado de la CECA, que trato de reflejar en este artículo. Espero no defraudarte, pues he seguido lo que tú supiste exponer de forma maravillosa.

¿Por qué surgió la Unión Europea? Para Schuman 'abandonar a Europa no sólo supondría levantar acta de un suicidio, sino asumir ante la Historia la terrible responsabilidad de haber dejado perderse un patrimonio que se nos confió hace casi 2.000 años y al que nuestros antepasados confirieron un brillo incomparable. Debemos y queremos devolver a Europa su irradiación, su fuerza e independencia; en otras palabras, deseamos que esté nuevamente presente en su misión secular de guía y árbitro'. (Conferencia en Luxemburgo, 9-12-1953).

Para Monnet 'construir Europa es construir la Paz' y 'sólo podrá salvaguardarse la paz mundial mediante esfuerzos proporcionados a los peligros que la amenazan. Estos peligros son, siempre, los nacionalismos y los sueños de dominación'.

Los dos iniciadores de la Comunidad Europea tuvieron conciencia de que las naciones europeas se encaminan hacia una unión política que salvaguarde la paz y respete la diversidad de cada cual. Dicha conciencia traduce el contenido del principio de subsidiariedad, uno de los ejes de la doctrina social de la Iglesia, que ha sido recogido en el Tratado de Maastricht. Europa es la realización de una democracia generalizada, en el sentido cristiano de la palabra. La democracia sólo puede nacer en suelo cristiano.

Cuando en 1948 Schuman fue nombrado ministro de Asuntos Exteriores de Francia se da cuenta que para cualquier francés el problema más angustioso era Alemania. Cree que ha llegado la hora de ayudar a una Alemania vencida y humillada para que salga de su aislamiento, integrándola en pie de igualdad con los países europeos. En agosto de 1949 se entrevista con Konrad Adenauer; éste es partidario de un vínculo económico permanente entre Francia y Alemania, y seis meses más tarde Francia le hace la propuesta de una comunidad europea del carbón y del acero. Monnet ve la necesidad de hacer algo que impida una nueva guerra en el futuro, y redacta el primer borrador del proyecto de fusión del carbón y del acero en abril de 1950.

En sus memorias dice: 'La contribución que una Europa organizada y viva puede aportar a la civilización resulta indispensable para la salvaguarda de las relaciones pacíficas (...); Europa ha de organizarse sobre una base federal' (es la primera vez que se hace mención a una Europa federal, que todavía está por llegar). El Gobierno francés propone situar el conjunto de la producción franco-alemana de carbón y acero bajo una autoridad internacional abierta a la participación de otros países de Europa. 'Esta propuesta, continúa Monnet, tiene un alcance político esencial; abre en las murallas de las soberanías nacionales una brecha lo suficientemente limitada como para permitir las adhesiones y lo suficientemente profunda como para arrastrar a los Estados hacia la unidad necesaria para la paz'.

Schuman asumió rápidamente la responsabilidad política del texto de Monnet y se lo envió el 8 de mayo al canciller Adenauer. El 9 de mayo de 1950 se presentó al Consejo de Ministros de Francia y el Gobierno aceptó. Alemania hizo pública su adhesión al proyecto, Italia se adhirió rápidamente y después los países del Benelux; sin embargo en Inglaterra no cayó bien. Schuman recuerda en Pour l'Europe el riesgo que asume con la propuesta de la CECA, pero dice: 'La peor actitud en política es no saber decidir o tomar sucesivamente decisiones contradictorias (...). No habríamos acometido nada si no hubiéramos tenido fe en la justicia de nuestras ideas'. Al dejar en 1953 el puesto de ministro de Asuntos Exteriores, se dedicó a explicar el Plan Schuman y el futuro de Europa. En 1963 falleció uno de los dos grandes líderes de la Unión Europea.

Si Schuman asumió la responsabilidad política del Plan que llevó su nombre, Monnet fue su inspirador y su ejecutor. La conferencia de los seis países que se adhieren al mismo se celebró en París el 20 de junio de 1950, siendo Presidente de la misma Monnet, que la simultaneó con el Comisariado del Plan Schuman. A los 60 delegados presentes les dijo: 'Estamos aquí para culminar una obra común, no para negociar ventajas, sino para buscar nuestra ventaja en la ventaja común'. Para hombres formados en la defensa y la conquista de intereses puramente nacionales fue una lección de las más difíciles de asumir. Monnet pidió que no se utilizara la palabra 'negociaciones' a propósito de las reuniones, y ese día llamó 'Comunidad Europea' al objetivo a alcanzar. Monnet se vuelca en la creación de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero, cuya firma tuvo lugar el 18 de abril de 1951. Monnet es nombrado Presidente de la Alta Autoridad de la CECA, dejando el cargo de Comisario del Plan.

En 1954 Francia se opuso al desarrollo de la Comunidad Europea de Defensa, lo que llevó a Monnet a dimitir de la Alta Autoridad de la CECA. Los jefes de las grandes centrales sindicales alemanas le dijeron: 'El anuncio de su dimisión nos inquieta. Le hemos visto trabajando en la Presidencia de la Alta Autoridad y ha ganado nuestra confianza, ya que dice lo que hace y hace lo que dice. Nos ha convencido de que la Europa a cuya construcción ha invitado a asociarse a los trabajadores, constituye el destino de éstos y el de la paz. Díganos qué va a hacer. Estaremos con usted'.

En 1955 Monnet anuncia la creación de un 'Comité de acción a favor de los Estados Unidos de Europa', cuyos miembros serían representantes de los sindicatos y de los partidos, que se comprometen a realizar el objetivo encarnado por su nombre: los Estados Unidos de Europa. El primer objetivo del Comité fue la conclusión y ratificación del Tratado del Euratom. El 25 de marzo de 1957 se firman en Roma los Tratados que instituyen la Comunidad Económica Europea y la Comunidad Europea de la Energía Atómica.

Monnet considera que es el momento de avanzar hacia la unión política de Europa y se lo comunica a los miembros del Comité. El presidente francés, General De Gaulle, se convierte en el principal detractor de esta idea. En 1975, a los 87 años de edad, Monnet decide disolver el Comité de acción para los Estados Unidos de Europa. En sus memorias se pregunta hacia qué tipo de Europa vamos. Pasa el tiempo y Europa se demora en el camino en el que tanto se ha adentrado ya. No podemos detenernos cuando a nuestro alrededor el mundo entero se halla en movimiento. Y de nuevo se pregunta: '¿Habré explicado suficientemente que la Comunidad que hemos creado no es un fin en sí misma?'.

El 16 de marzo de 1979 murió el otro gran líder de la UE. Mi deseo sería que en estos momentos hubiera líderes como Schuman y Monnet, capaces de llevar a cabo lo que ellos soñaron: una Europa federal.

José Barea. Catedrático emérito de la Universidad Autónoma de Madrid

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