Delphi suspende pagos para afrontar el cierre en España
Delphi Automotive Systems España, la filial que gestiona la planta de Puerto Real, inició el proceso de suspensión de pagos con el fin de ejecutar el anunciado cierre de la planta gaditana. La empresa insiste en que la única salida es el cierre y ha pedido a la matriz de EE UU un fondo especial para afrontar el pago de los despidos de sus 1.600 empleados.
Delphi Automotive Systems España (DASE) confirmó ayer que ha presentado la solicitud para ser declarada en concurso bajo la Ley de Insolvencia española. La empresa, que asegura haber informado de este hecho a las autoridades competentes, así como a los sindicatos y a las demás partes implicadas, indicó que ha tomado esta decisión ante el 'continuado deterioro de su situación patrimonial y la imposibilidad de iniciar conversaciones sobre los asuntos relacionados con el cierre' de la planta.
Delphi avanzó que de esta forma se conseguirá un proceso global de resolución de acuerdo con la Ley Concursal española, con la supervisión de un juez e interventores designados por el mismo, que velarán por los intereses legales de empleados, proveedores y cualquier otra parte afectada por el cierre. Antes de presentar su solicitud, DASE ha obtenido el compromiso de su matriz estadounidense de proporcionar fondos adicionales a la planta española, con el propósito de abonar las indemnizaciones a las que los 1.600 trabajadores tienen legalmente derecho.
Según la multinacional, el cierre de Puerto Real concuerda con el plan de transformación anunciado en marzo de 2006, dentro del cual Delphi pretende centrarse sólo en líneas de producto estratégico en las que la compañía tiene ventajas competitivas y tecnológicas significativas, y vender o cerrar las líneas de producto no esenciales, como son las de direcciones, suspensiones y rodamientos, productos fabricados en la planta gaditana. Asimismo, Delphi argumenta que debido a los más de 150 millones en pérdidas acumulados en los últimos cinco años y a la incapacidad de asegurar nuevo negocio como resultado de los altos costes operacionales, la planta de Cádiz no está incluida en la propuesta de compra mundial del negocio de direcciones, por lo cual 'no queda otra alternativa que su cierre'. DASE es filial de Delphi Automotive Systems Holding Inc. (Dashi), compañía que engloba la mayor parte de las operaciones de la multinacional fuera de los Estados Unidos.
Dado que los activos de DASE se limitan a la planta de Puerto Real, no se va a presentar ninguna solicitud relacionada con procedimientos por insolvencia fuera de España. La matriz de Delphi se declaró el quiebra en 2005 según las leyes de EE UU.
Mientras tanto, la plantilla prosigue con las protestas. Los 1.600 trabajadores aprovecharon ayer la hora del bocadillo para manifestarse en el arcén de la N-443, de entrada a la capital gaditana, y repartir publicidad a los conductores que circulaban en ella, aunque no cortaron el tráfico 'porque la intención no es molestar a la sociedad'. Por otra parte, la Comisión de Industria del Congreso aprobó ayer por unanimidad una enmienda transaccional a una Proposición no de Ley del Grupo Popular en la que se insta al Gobierno Central a elaborar un plan para la continuidad de los empleos.
La Junta se persona y planea una denuncia
La Junta de Andalucía está dispuesta a dar todas las batallas en la crisis de Delphi. El consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, anunció que el Ejecutivo ha decidido personarse en el proceso de suspensión de pagos. Explicó que la decisión de la Junta se debe a su intención de efectuar un 'marcaje implacable' de todos los actos de Delphi y siempre con el objetivo de 'defender los intereses de los trabajadores'.También avanzó que no se descarta la iniciativa penal, siempre que 'haya base'. Los servicios jurídicos analizan una posible querella.