Reto industrial de EE UU
La historia reciente del motor en Estados Unidos se resume en fuertes pérdidas, reducción de empleo y caída drástica de su cuota de mercado. La otrora poderosa industria de Detroit atraviesa quizá la crisis de mayor calado de su historia, presionada por el buen hacer de los competidores europeos y japoneses. General Motors, Ford y DaimlerChrysler están inmersas en severos programas de ajuste que requerirán posiblemente no sólo un cambio de modelo industrial, sino también el desarrollo de un nuevo concepto de automóvil. El afán por crecer a través de la compra de otros fabricantes no ha funcionado, y sí lo ha hecho el modelo nipón, que se ha basado en el crecimiento orgánico y en una adecuada gama de vehículos. Aun así, tampoco es la primera vez que un sector clave de Estados Unidos entra en crisis, y previsiblemente tampoco será la primera vez que una industria de ese país logra superarla.