Los empresarios europeos deslumbran a los investigadores
Mezquinos, avaros, explotadores. Si alguno de estos prejuicios forma parte de su imagen de los empresarios europeos vaya preparándose a desterrarlos. Las consultoras McKinsey y TNS Sofres han sondeado, por encargo del grupo financiero Fortis, el ADN psicológico de los emprendedores de cinco países de la UE, entre ellos España, y la bondad y calidad de los hallazgos ha epatado incluso a los promotores de la investigación.
'Una de las cosas que más me ha sorprendido es que un tercio de los empresarios ni siquiera sabe el valor de su compañía', relataba ayer en Bruselas, durante la presentación de los resultados, Filip Dierckx, consejero delegado de la división de banca privada de Fortis.
La indiferencia hacia la propia riqueza se complementa con un rasgo que masajeará el ego de muchos empleados: más del 60% de los empresarios consultados en España, Reino Unido, Francia, Bélgica y Holanda, consideran sus recursos humanos como el activo más valioso de la compañía. 'Por detrás, pero a una enorme distancia, vienen la innovación y el I+D', subraya Fabienne Caderat, una de las investigadoras de TNS Sofres.
En España el 52% de los empresarios son menores de 45 años y sólo el 16% supera los 55. La proporción de mujeres alcanza ya el 17% del total, diez puntos más que en Reino Unido
Para Diercks, la descripción que Fortis ha obtenido de sus clientes habituales gracias a las dos consultoras sólo tiene una explicación. 'Se podría decir que la vocación empresarial es un estado mental, enraizado en el ADN de los propietarios de la compañía'. Y el directivo de Fortis cree que 'a pesar de las grandes diferencias entre los países analizados, se pueden extraer algunas conclusiones pertinentes'.
La mitad de los encuestados (más de un centenar por país) se consideran autodidactas, procedentes de la clase media y con algún antecedente familiar relacionado con el comercio.
A partir de esos rasgos comunes, el retrato robot empieza a arrojar resultados diferentes en cada uno de los cinco países, elegidos porque Fortis tiene en ellos una presencia tanto en banca comercial como privada.
La edad de los empresarios encuestados (propietarios de empresas con una facturación de entre 2,5 millones de euros y 250 millones) fue la primera sorpresa para los investigadores. En España, el 52% son menores de 45 años y sólo el 16% supera los 55. Las cifras se invierten en economías más maduras, como la francesa, que presenta la media de edad más alta (50 años).
'Los empresarios, como los países, son producto de la cultura y de la historia', analiza Caderet. 'Y está claro que en España, una economía en plena expansión desde hace tres años, hay toda una nueva generación'. El empresariado español, sin embargo, sigue orientado, según el estudio, hacia el mercado nacional o, incluso, local, mientras que los veteranos de los otros países ya han saltado fronteras.
Pero los datos más sorprendentes del estudio sobre España revelan que sí se están produciendo otros cambios. Los empresarios españoles son los que menos participación accionarial tienen en sus compañías. Y la proporción de mujeres empresarias alcanza ya el 17% del total, diez puntos más que en Reino Unido.