Netflix hace crecer el cine en internet con un nuevo servicio 'online'

En la era del correo electrónico hay una compañía estadounidense que no deja de crecer gracias al correo tradicional, el del buzón en la calle. Se trata de Netflix, una empresa californiana fundada en 1999 para proveer por correo películas en DVD, pedidas en la red y sin necesidad de pasar por el videoclub.

Pese a que entonces tener una dirección de correo era ya prácticamente universal, Netflix no ha dejado de crecer y tiene 6 millones de suscriptores. Ahora, la empresa está preparando su nueva ofensiva: el alquiler a través de descargas directamente desde internet, un medio llamado a complementar a la televisión.

Reed Hastings, fundador y primer ejecutivo de Netflix anunció esta semana que empezará a ofrecer este servicio de descargas a 250.000 suscriptores cada semana hasta llegar a junio cubriendo su actual clientela. El servicio será gratis para sus suscriptores que pagan una tarifa plana (hay varias) por tener continuamente un determinado número de películas. La más popular es de 17 dólares por tres cintas. Dependiendo del contrato se podrán ver entre seis a 48 horas al mes. En un inicio solo habrá 1.000 títulos de películas y programas de televisión accesibles, muy poco si se compara con las cerca de 70.000 películas que tiene su servicio por correo.

Los analistas creen que es un movimiento necesario pero tímido para una compañía que rompió moldes cuando abrió y que ha forzado a hacer cambios a su rival Blockbuster, quien ha copiado el modelo de negocio y mejorado al poder combinar el servicio postal con el de las tiendas.

Parte de lo que se critica a Netflix es que el nuevo servicio solo está disponible para ordenadores personales equipados con el sistema operativo Windows de Microsoft, además otras empresas como MovieFlix, Vongo, Amazon y Apple Computer han lanzado servicios similares. iTunes, por ejemplo, vende las películas y con su nuevo sistema Apple TV se pueden ver en las nuevas y modernas pantallas de televisión.