Los accionistas de Euronext aprueban la fusión con Nueva York
Los accionistas del mercado paneuropeo Euronext dieron ayer un aplastante visto bueno a la fusión con la Bolsa de Nueva York. Esta última se pronunciará hoy sobre la creación de la primera Bolsa transatlántica.
La fusión de Euronext, gestora de las Bolsas de París, Bruselas, Lisboa y Ámsterdam, y la Bolsa de Nueva York recibió un gran espaldarazo ayer, después de años de grandes operaciones fallidas. Los accionistas de Euronext dieron ayer un aplastante visto bueno a la operación, con un 98,2% de votos a favor de y superando algunas voces reticentes inquietas por las leyes de regulación estadounidenses.
El voto de ayer confirma el interés de los accionistas de Euronext, que ya en el mes de mayo se pronunciaron a favor de la unión con NYSE en una votación no vinculante. Atrás queda la presión de París y Berlín, partidarios de una fusión entre el operador paneuropeo y Deutsche Börse, que finalmente se retiró de la carrera el mes pasado.
En ausencia de nuevas negociaciones entre Francia y Alemania, accionistas de referencia del operador europeo como el hedge funds Atticus o el banco francés Société Générale, que controlan en torno al 10% y al 3%, respectivamente, apoyaron el plan estadounidense. De lograrse, la fusión supondrá una etapa determinante en la concentración de los operadores bursátiles en Europa y en Estados Unidos.
Las inquietudes de aquellos accionistas reacios a la operación por el temor al cruce de ambos mercados quedan lejos de la realidad de la fusión. Euronext y NYSE sólo cruzarán los sistemas de negociación, ya que el mercado estadounidense será independiente del europeo. Lo mismo sucede con la regulación de sus actividades, que serán seguidas de forma independiente por las autoridades reguladores de uno y otro lado del Atlántico.
La operación, valorada en 14.000 millones de dólares, generará unas sinergias de ingresos y de ahorros de 375 millones. En un documento presentado ayer por la mañana, Théodore explica que la fusión se lanzará 'a principios de 2007'. Además, el patrón de la Bolsa paneuropea recordó que Euronext sigue 'abierto' a la posibilidad de integrar la Bolsa italiana en el nuevo gigante.
Según el acuerdo alcanzado, los accionistas podrán cambiar un título de Euronext por 0,98 títulos de la nueva NYSE Euronext y 21,32 euros en metálico, valorando la oferta en 95,53 euros por cada título de Euronext, un 35% de lo que se anunció en el plan original de fusión. Según el acuerdo alcanzado ayer, las direcciones de Euronext y de NYSE tendrán el mismo peso en el consejo de administración del nuevo grupo, con 11 representantes cada una.
Por su parte, Nasdaq, principal rival de NYSE, ha lanzado una opa hostil sobre la Bolsa de Londres. Ayer el mercado británico anunció un alza del 50% en el dividendo para combatir la oferta estadounidense.
Los flecos pendientes de la unión
Ahora falta la aprobación de los accionistas de NYSE, que se pronunciarán hoy sobre la operación, un voto que se espera sea positivo, según los analistas. Después quedará pendiente la luz verde de las autoridades financieras holandesas, donde está la sede de Euronext. Los supervisores franceses ya se han pronunciado a favor.A favor de la operación se ha pronunciado el Ejecutivo holandés, cuya luz verde es indispensable, ya que tiene derecho de veto. El ministro de Finanzas, Gerrit Zalm, envió esta semana una carta a ambos operadores en la que explica su intención de 'dar su acuerdo a las declaraciones requeridas de no objeción'. No obstante, pone condiciones, y dice estar a la espera de 'información sobre la organización y sobre las operaciones de los mercados locales'. Tanta prudencia se explica por el interés de Ámsterdam de controlar las transacciones.