La lucha por el entretenimiento digital
Los vínculos entre el entretenimiento en el hogar y el que es fácilmente transportable son cada vez mayores. Apple ha tenido grandes aciertos en este campo en el que, según el autor, el gigante Microsoft, aunque tiene mucho que avanzar, ha hecho con el Zune una potente declaración de principios
Hace pocas semanas Microsoft anunciaba que entra a competir directamente con el iPod de Apple con su nuevo producto de entretenimiento, Zune. Con el mismo precio y capacidad que el iPod de mayor tamaño, un poco más grande y con una pantalla ligeramente mayor, Zune parece no aspirar, por ahora, a romper el mercado con una propuesta innovadora. Más bien se trata de conseguir captar la atención del mercado y anunciar su intención de competir, durante el tiempo que sea necesario, para tener un hueco en este mercado.
Tras haber intentado durante unos años una estrategia basada en la colaboración con otras firmas, entre ellas tiendas de música, fabricantes de dispositivos o creadores de contenidos, parece que ha llegado el momento de tomar el control de un mercado que se ha convertido en un monopolio de hecho de la marca de la manzana.
Hicieron lo mismo hace unos años con la Xbox, su plataforma para videojuegos, entrando en un mercado que Sony dominaba con holgura gracias a la millonaria en ventas PlayStation. El resultado de años de evolución y de una nueva versión mejorada y con capacidad para convertirse en centro de entretenimiento para todos los miembros de la familia, la Xbox 360, se traduce en unas ventas de más de cinco millones de unidades. La diferencia con el caso que nos ocupa, es que mientras en videojuegos la competencia era otro gigante que se movía a un ritmo más o menos normal para la industria, ahora se trata de competir con un jugador que va más rápido que nadie.
Una de las características que está haciendo del iPod un gran éxito es que en Apple han conseguido convertirse en su peor competidor. Cada seis meses las capacidades y aspecto de los nuevos iPod mejoran, mientras su precio se mantiene o incluso cae.
Con un retraso de un año en su producto principal, el Windows Vista, no está demasiado claro cuál es el ritmo de innovación que Microsoft puede generar para hacer frente a la frenética carrera a que Apple ha sometido a su producto estrella. Millones de unidades en el mercado y grandes perspectivas de crecimiento demuestran la rapidez con la que el entretenimiento digital está entrando en la vida y los usos sociales de medio mundo.
En este campo Microsoft es uno de los grandes competidores a seguir, con posiciones no sólo en el mundo del videojuego y en los reproductores digitales. Otro de sus puntos fuertes es su presencia en los teléfonos móviles de última generación, que son la gran esperanza para los operadores, y para muchos la ventana al mundo no sólo de las comunicaciones sino cada vez más del entretenimiento. Tonos, música, vídeos y dentro de muy poco la televisión serán los protagonistas en su móvil. Y la evolución no termina ahí. Los vínculos entre el entretenimiento en el hogar y el que podemos llevarnos a cualquier sitio son cada vez mayores. El archivo de música y vídeo de casa ya no serán un montón de cajas llenas de polvo en una estantería. El futuro cercano, el presente para algunos usuarios avanzados, será un archivo digital con todas las fotos, vídeos, álbumes musicales y películas, listo para ser cargado y reproducido en cualquier entorno: su hogar, su coche, la sala de espera del aeropuerto o durante un paseo por el parque.
Quien consiga hacer fácil la transición, manejar este entorno complejo de la misma forma sencilla y amistosa, tendrá muchas posibilidades de ganar. Ese ha sido uno de los grandes aciertos de Apple: resolver de forma sencilla la compleja gestión de la 'personalidad musical' de sus usuarios. Quien consiga ocupar un lugar en el bolsillo y un vínculo emocional con el usuario tendrá muchas posibilidades de hacerse con los ingresos que este nuevo entretenimiento digital ubicuo está generando.
El producto de Microsoft, aunque tiene mucho que avanzar para poder competir de frente con el iPod, es una potente declaración de principios, y una pieza más para hacerse con el entretenimiento dentro y fuera del hogar, en cualquier dispositivo, que nos espera a la vuelta de la esquina.
Ricardo Pérez Director del Master of Management in Telecom and Digital Business del Instituto de Empresa